La lluvia genera daños en dos cantones del Guayas
Las lluvias provocaron visibilidad reducida en el aeropuerto ayer
Hasta las 16:30 de ayer, el alcalde del cantón Isidro Ayora, Ignacio Cercado, y personal del Comité de Operaciones Emergentes (COE), continuaban realizando la evaluación total de los daños provocados en el sitio; luego del desbordamiento de los ríos Ciénega Redonda y Bachillero, que inundó en su totalidad a los recintos San Agustín y Corosal.
Tras la emergencia reportada la tarde del martes en el recinto San Agustín, el más afectado, los buzos del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) sacaron de las viviendas a decenas de familias que se encontraban bajo el agua y las trasladaron a lugares seguros. Hasta ayer, el sector continuaba inundado.
Ante la situación, Cercado confirmó a EXPRESO que son 148 las familias damnificadas por el agua que ingresó a sus viviendas. Hasta el cierre de esta edición en ambos recintos, el agua había bajado un 70 %. En condiciones similares se encontraban los recintos San Pablo, San Felipe, Las Palmas, Campin 1, Campin 2 y La Seca, también afectados.
En el cantón Pedro Carbo, donde también se reportó una emergencia similar, el alcalde Javier Gómez señaló que la creciente de los ríos y las lluvias registradas durante el reciente feriado originaron la caída de cuatro puentes colgantes en los recintos Las Anonas, La Providencia, Mata Palo y Paraíso de Villao. Alrededor de 500 familias están aisladas, la mayoría en casas de familiares y amigos.
En el sitio, donde los técnicos del COE también se han instalado, varias vías están cortadas como la carretera Cascajal-zamora, la vía Villao y a la Monserrat.
“Estamos tratando de ver cómo solucionamos la caída de estos puentes, ya que el desbordamiento del río Villao que desemboca en Pedro Carbo ha causado bastantes daños, incluso en los cultivos de arroz, maíz, papaya, maní, entre otros productos”, detalló Gómez.
La lluvia tampoco cesó en Guayaquil, donde se inició la tarde de ayer acompañada de truenos y al entrar la noche se registraron algunas calles anegadas. Desde la Dirección General de Aviación se notificó que la poca visibilidad obligó a los pilotos a mantenerse en patrón de espera.