Huida y recaptura de un condenado a 34 años
Un interno de la cárcel de Guayaquil burló los filtros de máxima seguridad ❚ Lo hallaron con su pareja en una zona cercana
De semblante relajado, un sujeto sentenciado a más de 34 años de prisión por el asesinato de un policía, posaba ante los gendarmes tras su recaptura. Tiene 26 años de edad y solo ha cumplido unos 3 de su condena.
La noche del pasado lunes esta persona privada de libertad (PPL) no regresó a su celda y huyó del área de Máxima Seguridad del Centro de Privación de Libertad Zonal 8, Regional Guayas, en Guayaquil.
A la mañana siguiente, el personal de Seguridad Penitenciaria recién notó su ausencia. A las 08:00, se alertó oficialmente de la fuga de Carlos Alfredo Luna Usma y agentes de diferentes unidades policiales empezaron a buscarlo. No tuvieron que recorrer mucho.
A las 11:30, lo hallaron en un cerro que está al frente del centro carcelario, en la cooperativa San Francisco, del noroeste de la urbe.
El interno fue localizado por miembros de la Subdirección de Investigación de Delitos contra el Derecho a la Propiedad (Sidprobac).
El jefe de esta dependencia, mayor Francisco Hernández, dijo que el PPL se ocultaba cerca de unas antenas de transmisión, entre maleza, en compañía de una adolescente, quien se identificó como su pareja.
Con ella, el individuo habría pretendido pasar un día más en el sector, hasta que culminaran las 24 horas que dura la flagrancia y así emprender una ruta de escape. Su plan era salir del país, reveló el jefe policial.
Luna Usma portaba dos teléfonos celulares y en uno de estos tenía imágenes que revelaban parte del camino que había tomado para fugar. Tenía fotografías en las que se observaba la maleza que está en los alrededores del centro carcelario. También había otra en la que capturó a una torre de vigilancia y una en la que aparecía un cerco de mallas. Las autoridades, sin embargo, no han detallado cuál fue el fallo de seguridad que permitió su huida.
Hernández sostuvo que es la primera vez que un prófugo se dedica a tomar fotos, incluso autorretratos, mientras huye.
Carlos Luna fue sentenciado por el crimen del policía César Vallejo, quien lo había interceptado tras una persecución originada tras un robo, el 16 de noviembre de 2016, en Lago Agrio, provincia de Sucumbíos.