Fieles agradecen a la Señora del Rosario
La matrona de Baños está de fiesta y los devotos le rinden tributo
Baños de Agua Santa, es conocida como ‘Pedacito de cielo’ por su clima y los paisajes naturales que ofrece a los visitantes. También la conocen como la ‘Puerta al Dorado’, porque fue la vía que escogió Orellana en la búsqueda del tesoro de Atahualpa y, el descubrimiento del Amazonas.
Tiene una tercera denominación popular, que es ‘Ciudad del volcán’, porque se asienta en las faldas del Tungurahua.
Lo que más caracteriza a su gente es la fe en su protectora, la Señora del Rosario de Agua Santa.
Esa devoción habría empezado en 1570, con la llegada de la Orden de los Dominicos, encargada de evangelizar en la región de Canelos y Bobonaza, en la conquista española.
Una noche, mientras descansaban en las chozas del poblado (actualmente Baños), la Virgen abandonó el templo acompañada de dos ángeles y se quedó a descansar al pie del chorro de agua que brotaba de la montaña. Esa visión sorprendió al párroco y habitantes, quienes le pidieron en oración que se manifestara.
Días después, ella les habría contestado y les solicitó que le construyan un templo en la chorrera, donde las personas que se bañen en las aguas serán curadas de sus dolencias, comenta Fabio
Herrera, de la Orden Dominica.
Los fieles creyentes cumplieron con la petición de la Virgen y la bautizaron como la Señora del Rosario de Agua Santa.
Esta historia y algunos de los milagros que se le atribuyen a la Matrona están expuestos a un costado de la basílica. Cada acción atribuida a la Señora del Rosario está escrita en cuadros dentro de la iglesia, ubicada en las calles 16 de Diciembre y 12 de Noviembre, centro del cantón.
Elsa Acosta, una de las devotas de la santa, cuenta que acude al santuario para darle gracias por la vida y salud de ella y su familia. Entonces aprovecha para recorrer la edificación religiosa y leer los diversos milagros que se le adjudican a la Virgen.