Promesas falsas y mentirosas
Al acercarse las elecciones el 7 de febrero, los candidatos se desesperan y prometen sabiendo que no van a cumplir, engañando a los incautos votantes, burlándose de su desesperación. Parece una competencia entre ratas, rateros y ratones, con limitadas excepciones. Solo quieren llegar al poder para saquear como han hecho siempre. Un caso exagerado es el candidato Arauz, que demagógicamente quiere comprar el voto al decir que regalará $ 1.000 a un millón de personas (mil millones de dólares). La mentira cae por sí sola: si el gobierno no tiene dinero y está endeudado con todos, ¿de dónde va a sacar el dinero este mentiroso? El gobierno elabora anualmente su presupuesto, por consiguiente el dinero que pretende regalar Arauz no está financiado. La nefasta, ridícula y malhadada propuesta debe ser rechazada por la ciudadanía, debemos exigir, más bien, que devuelvan lo robado por Correa y sus secuaces. Otra ocurrencia de Arauz es la minería inversa. Él considera que existe oro en los celulares; no sabe que el oro en un celular es mínimo y no es valorable. También nos habla en forma incoherente de recuperar el futuro. Los educadores le indicamos que no se puede recuperar lo que no existe. Además tiene la intención de desdolarizar el país, lo que nos llevaría a convertirnos en otra Venezuela. Valdría saber, de llegar a la presidencia, cual será su posición con sus coidearios correístas que están prófugos, presos y sentenciados.
Lic. Ricardo Ordóñez Jaramillo