El G20 aprueba el sistema fiscal global
La medida busca evitar que las multinacionales evadan impuestos
Los ministros de Finanzas y los gobernadores de los bancos centrales del G20 aprobaron ayer el mecanismo sobre fiscalidad para multinacionales consensuado el 1 de julio en el marco de la OCDE, y ahora se centrarán en convencer a los países que aún muestran reticencias para que se sumen.
“Este es el resultado de un esfuerzo común. Espero que los países que no se han sumado cambien su decisión”, declaró el ministro italiano de Finanzas, Daniele Franco.
En la Unión Europea (UE), Irlanda, Hungría y Estonia, que han atraído durante años la inversión privada por sus tipos tributarios bajos, han mostrado sus dudas para adherirse a este mecanismo, pero el ministro italiano confió en que “cambien de opinión” porque, dijo, los países del G20 representan alrededor del 90 % del producto interior bruto (PIB) mundial y esto “es una presión para el resto”.
El acuerdo alcanzado en el G20 es “histórico”, según han remarcado los ministros y banqueros en la declaración final, porque tratará de evitar que las multinacionales se alojen en paraísos fiscales y eviten pagar impuestos. El sistema fiscal se sustenta en dos pilares: el primero concierne a todas las compañías con una facturación mundial superior a los 20.000 millones de euros y con una rentabilidad (relación entre beneficios e ingresos) superior al 10 %. El segundo pilar es aplicar un tipo mínimo del impuesto de sociedades de al menos el 15 % a las empresas con una facturación de al menos 750 millones de euros.