Se deteriora la salud de los maestros
La reforma a la LOEI crea prestaciones que no están financiadas
Luego de cuatro días de haber iniciado la huelga de hambre, la salud de algunos maestros ha comenzado a deteriorarse, por lo que un equipo de la Cruz Roja del Guayas, acudió ayer a la plaza San Francisco, ubicada en el centro de Guayaquil, para prestarles los primeros auxilios.
El lunes pasado, un grupo de docentes inició esta medida para exigir que se levante la suspensión temporal de la vigencia de la Reforma a Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOES), que promueve cambios en la educación.
Desde entonces, 12 profesores agremiados a la Unión Nacional de Educadores (UNE) se mantienen acostados sobre colchonetas. “No consumimos alimentos, solo bebemos agua. Parece que eso nos está debilitando”, dijo Pedro Delgado, quien participa en esta jornada.
Al maestro se le bajó la presión y por ello tuvo que ser atendido por miembros de la Cruz Roja. “Seguiremos en pie de lucha hasta conseguir nuestro objetivo”, recalcó.
Pero no es el único que manifiesta problemas en su salud. Raúl Pinela y Mercedes Robalino también fueron atendidos.
Ambos son hipertensos y comenzaron a sentir dolor de cabeza, acompañado de problemas estomacales.
La Corte Constitucional tramita una demanda de inconstitucionalidad sobre la reforma a la LOEI, que establece un salario mínimo de 1.000 dólares para los maestros, el retorno del bachillerato por especialidad, el reintegro de docentes que fueron desvinculados en la pandemia, entre otros.