Bucaram queda fuera del caso pruebas
Al cierre de la edición, la audiencia continuaba en el Complejo Judicial
Alas 16:00 de ayer, en el complejo
Judicial Norte de Quito, se reinstaló la audiencia preparatoria de juicio por posible delincuencia organizada atribuida a siete procesados.
El juez de la Unidad Judicial Penal de Iñaquito, Geovanny Freire, leyó todos los elementos presentados por la fiscal Lidia Sarabia durante la audiencia.
Entre los investigados se encontraban el expresidente Abdalá Bucaram y su hijo Jacobo. El juez Freire sobreseyó a ambos. El caso es por las presuntas irregularidades en la negociación de 21.000 pruebas rápidas. Fueron involucrados además a agentes de Tránsito, un ciudadano israelí y otra sospechosa.
En la misma causa otros dos agentes de Tránsito ya fueron sentenciados porque aceptaron su responsabilidad en los hechos imputados a través de un procedimiento abreviado.
La Fiscalía consideró que los procesados habrían planificado y ejecutado actividades ilícitas en Quito y Guayaquil entre noviembre de 2019 y agosto de 2020. Entre ellas la obtención de beneficios económicos, varios de ellos en el contexto de la venta de pruebas y mascarillas, durante la emergencia sanitaria que provocó el confinamiento y el estado de excepción, dispuestos en 2020.
El juez citó versiones rendidas en la instrucción fiscal, pericias, informes y otros elementos presentados en la investigación. Uno de los audios citados fue el del diálogo mantenido entre Abdalá Bucaram y Shy Dahan, el israelita asesinado en la cárcel de Guayaquil. En la instrucción también se recibieron versiones de vocales de la Judicatura.