Nuevos platillos en Mercado del Río
Sus paredes de vidrio permiten observar el esplendoroso río Guayas, mientras que en distintos establecimientos se logra ver cómo se preparan los platillos. Así es el panorama en el Mercado del Río, espacio gastronómico ubicado en el malecón Simón Bolívar, que también comenzó a reactivarse y lo hace con sus motores: establecimientos que ofrecen una amplia variedad de delicias, como sopas, ceviches, comida criolla, hamburguesas, parrilladas...
El sitio es un punto de encuentro de familiares y amigos, quienes ya perdieron el miedo que genera la pandemia y han decidido revivir aquellos almuerzos grupales, celebrar allí los cumpleaños o disfrutar de una cerveza fría o cualquier coctel frente al manso río. Por ejemplo, Lisetthe Briones, residente de La Atarazana, llega atraída al espacio por los mariscos y la comida típica.
“En los días críticos de la pandemia me daba pesar ver los restaurantes de Guayaquil cerrados. Aquí el ambiente es hermoso, pues qué mejor manera que contemplar el río Guayas que comiendo un ceviche. En serio, Guayaquil lo necesitaba”, confiesa la joven, al recordar que después de comer le encanta fotografiarse al pie del afluente junto a sus familiares o compañeros del trabajo. “Aprovechamos y hacemos una pequeña sesión de fotos”, comenta entre risas.
Los propietarios de los restaurantes, como Beto Vásconez, de La Esquina de Beto, que tiene 25 años en la ciudad, aseguran que tienen mejores días, aunque recuerdan que estuvieron afectados por los días paralizados. Pero hoy Beto está contento de que Guayaquil se levante y espera que, así como Lisetthe, los guayaquileños se quiten ese ‘chip’ del miedo. “Estamos apuntando a una reactivación y así debemos seguir todos, que haya más vida en la ciudad”, remarca.
Entre las recientes novedades de Mercado del Río resalta Walter Fish, restaurante que basa su menú en mariscos, y que apenas tiene dos semanas de haber llegado a la plaza gastronómica. En la cocina resalta con su traje blanco el chef Barza, que cautiva a los comensales con platillos cuyo sello es una fusión ecuatoriana-japonesa. La acogida, según dice, ha sido positiva y los visitantes han colocado al chop suey de cangrejo como el plato estrella del negocio.
Es así que los locales, que se encuentran distribuidos entre las naves El Astillero y El Carmen, apuntan a seguir conquistando los paladares de una forma segura y con múltiples sabores. Además, la música en vivo está presente los días viernes y sábado.
Los guayaquileños deben de quitarse ese chip del miedo. Ya estamos reactivados y así debemos seguir para apoyar a la economía y a la vida en la ciudad. Beto Vásconez, propietario de La Esquina de Beto