Diario Expreso

Dos muertes tras ataque de sicarios en Quevedo

Un conductor de taxi fallece al recibir disparos que iban dirigidos contra un pasajero ❚ Una mujer que también viajaba recibió tiro

- DANIEL VITE ■ QUEVEDO

Entre las primeras hipótesis que la Policía está manejando, sobre la muerte de un taxista la tarde del martes es que sería producto de un ajusticiam­iento vinculado con la venta de sustancias sujetas a fiscalizac­ión.

Este ataque causó conmoción a los habitantes de la parroquia Viva Alfaro, del sector El Desquite, al sur de Quevedo.

El jefe de la Policía en Quevedo, Wilson Torres, detalló que antisocial­es que viajaban en un vehículo marca Kia sacaron un fusil y arremetier­on contra un taxi que circulaba por la zona. Producto de la balacera perdió la vida el chofer del taxi Freddy Bernardo Rezabala Demera, de 36 años, y la pasajera Juilyn Lilibeth Sánchez Cedeño, de 26 años. También resultó herido Estiven Armando Martillo Maldonado, de 26 años. Según la Policía, esta persona sería el blanco de ataque.

Torres indicó que hay evidencias balísticas levantadas de armas de fuego de un fusil calibre 2,23 un revólver y una pistola, lo que fue un ataque inminente para los del vehículo tipo taxi. El jefe policial detalló que se está investigan­do el hecho debido a que todo quedó registrado en cámaras de videovigil­ancia que están en la zona.

En estas se puede observar que el taxi ingresa a las 15:30 por la avenida principal Jaime Roldós hacia el sector del camal viejo. Atrás del taxi hace su ingreso el auto blanco, que a toda marcha se coloca a un costado del taxi, del lado del chofer y desde ahí se realizan los disparos.

El primero que recibió los balazos fue el taxista, quien, según la Policía, sería una víctima del ataque ya que solo estaría haciendo la carrera a las otras dos personas.

Juilyn al parecer no pudo hacer nada contra la balacera y recibió disparos en la cabeza que la dejaron gravemente herida.

Testigos de la zona narraron a la Policía que “todo fue como una película de narcos”, en la cual los pistoleros no dieron chance a nada.

Sin embargo, la persona que quedó herida se escudó en el chofer del carro por lo que solo unos cuantos disparos le cayeron en su humanidad, de no haber sido así la historia se hubiera contado diferente.

A pesar de la suerte, sí recibió un disparo que le destrozó la pierna, además de los que recibió en la espalda, pero estos al parecer no complicaro­n órganos vitales.

Familiares de la fallecida no quisieron identifica­rse por temor a represalia­s, pero comentaron que Juilyn y su esposo eran compadres de Estiven (herido) y lo habían acompañado a realizarse una terapia ya que tenía un problema en una de sus piernas.

Fue por tal motivo que cogieron el taxi y cuando ya estaban de regreso a sus hogares, la mujer decidió acompañarl­o, incluso una hija de ellos se quedó, de lo contrario también estaría entre las víctimas.

Esto ocurrió a una cuadra del velorio de José Vargas Montiel, quien falleció la noche del domingo pasado, luego de que un antisocial le disparara.

Como había varias personas en el velorio, estos corrieron hasta el lugar y sacaron al chofer del taxi dejándolo tirado en la calzada. Esto para llevar a los heridos en el mismo taxi baleado hasta el hospital de Quevedo que queda unos 5 minutos de donde ocurrió el hecho.

Según fuentes policiales el herido tiene antecedent­es delictivos por asesinato y robo.

LA FRASE

Hay evidencias de armas de fuego de un fusil calibre 2,23. El ataque era para los del taxi.

WILSON TORRES, jefe de la Policía en Quevedo

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DANIEL VITE / EXPRESO Quevedo. Una mujer llora en el lugar donde tres personas fueron atacadas a bala por desconocid­os.

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