En el último día del paro hubo una marcha pacífica
El bloque de vías dejó al país el enésimo día de pérdidas y desesperación
Cierres y bloqueos parciales. Así amanecieron las vías de varias provincias del país cuando la protesta indígena cumplió el día 18. Los cierres siguieron en vías de Cotopaxi, Tungurahua, Pastaza, Bolívar, Chimborazo y algunas de Imabura.
Ayer, la radicalización de la protesta y la marcha masiva que debía realizarse hacia el centro histórico de Quito, significaron la movilización de delegaciones indígenas de varias provincias, que llegaron a la capital.
Desde las 09:00 empezaron a concentrarse los manifestantes en los exteriores de la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CEE) en el parque de El Arbolito, para realizar la que sería la última movilización en la capital en contra del Gobierno del presidente Guillermo Lasso.
Alrededor de 2.000 personas recorrieron la calle Tarqui y la avenida 10 de Agosto hasta llegar a la Basílica del Voto Nacional, en el centro. Inicialmente tenían previsto llegar al Centro Histórico de la capital.
Pero decidieron tomar la avenida América hasta llegar a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), ubicada junto al Seminario Mayor, en el norte de Quito. En ese sitio se realizó el diálogo entre el Gobierno y la dirigencia indígena, con la mediación de la Conferencia Episcopal.
Durante el recorrido, que duró cerca de dos horas, no se registraron incidentes ni hubo enfrentamientos con la Policía Nacional. Los manifestantes habían ofrecido que sería una marcha pacífica.
De hecho, un grupo de motorizados de la institución policial guio la movilización por varias calles estratégicas hasta llegar al parque Italia, cercano a la sede del diálogo.
Los manifestantes indígenas, a los que se les sumaron organizaciones de estudiantes universitarios y docentes, decidieron aguardar en este espacio público el resultado de las conversaciones realizadas ayer.
Momentos tensos se vivieron en los exteriores de la Conferencia Episcopal, cuando el presidente de la Conaie, Leonidas Iza, salió a consultar a los presentes sobre la firma del documento.
“No son 15, son 40”, empezaron a gritar los manifestantes cuando conocieron de la reducción de cinco centavos más a los combustibles que plantea el Gobierno, dentro del “acuerdo de paz” que puso fin a las protestas que por 18 días paralizaron al país.
“Iza, no firmes acuerdo”, empezaron a gritar también en señal de rechazo.
La mañana de ayer jueves 30 de junio, la Panamericana Norte, a la altura de San Miguel del Común, en Calderón, amaneció parcialmente habilitada. Montículos de tierra en el carril del sentido sur-norte impedían a esa hora el tránsito vehicular.
En el otro lado de la carretera, los vehículos debían pasar por encima de una montaña de tierra que los comuneros colocaron para obstaculizar el paso días atrás. En la Ruta Viva también hubo cierres parciales en la vía al aeropuerto.
LA CIFRA
2.000 MANIFESTANTES recorrieron las calles y avenidas de Quito en el último día
del paro nacional.