La villa romana con mural de Caravaggio, por tercera vez, no tiene un comprador
La histórica edificación fue levantada a finales del siglo XVI en Roma
Conocida como la Villa de la Aurora, el palacio romano que conserva el único mural conocido de Caravaggio, volvió ayer a quedar sin comprador, por tercera vez, en la subasta ordenada por el juez pasa a saldar las deudas de sus propietarios.
En esta ocasión el precio de salida de la mansión era de 315,5 millones de dólares, con un descuento del 20 % respecto al valor de la segunda subasta de abril, también desierta, según consta en el portal de ventas públicas del Ministerio de Justicia italiano.
La Villa de la Aurora es un palacio de seis plantas y jardín, con una superficie de unos 2.800 metros cuadrados, en el corazón de Roma, residencia histórica de la familia Boncompagni Ludovisi, cuna de cardenales e incluso de dos papas a lo largo de los siglos.
Pero ahora los jueces del Tribunal de Roma han ordenado su subasta porque los herederos de su último propietario, Nicolò Boncompagni Ludovisi, fallecido en 2018, eran incapaces de mantenerlo y debían saldar una deuda tributaria.
El palacio, hoy en gran parte en desuso, fue en el pasado uno de los centros de poder de Roma y su belleza fue alabada por Goethe, Stendhal o D’annunzio. Sin embargo su importancia esencialmente reside en que en una de sus muchas estancias conserva el único mural conocido del gran pintor del barroco italiano, Michelangelo Merisi da Caravaggio.
En concreto, el maestro del “Cinquecento” dejó para la posteridad un mural de un orbe con los dioses Júpiter, Marta y Plutón desnudos en el techo de una habitación de la primera planta de la villa, que en el pasado fue el laboratorio de alquimia de un cardenal.