Del agua al pingüino: la cadena contaminante de microplásticos
Aparece en ‘Plos One’, un estudio en el que participan científicos ecuatorianos ❚ Investigación alerta de los altos niveles de contaminación en el ecosistema
La expedición a las islas Galápagos se hizo en octubre de 2021, cuando las cifras de contagios por la COVID-19 todavía encabezaban la mayoría de los titulares. Cinco investigadores, entre los que se encontraban miembros del Parque Nacional Galápagos (PNG), de la Escuela Superior Politécnica del Litoral de Ecuador (Espol), y el biólogo ecuatoriano Juan José Alava, de la Universidad de British Columbia (UBC), Canadá, desembarcaron al igual que lo hizo el icónico Charles Darwin hace 186 años.
Los científicos tenían la misión de conocer si los pingüinos de Galápagos (Spheniscus mendiculus) se estaban viendo afectados por los microplásticos que flotan en el ecosistema y que, a nivel mundial, han alcanzado hasta un promedio de 170 billones de partículas.
¿Por qué los pingüinos? “Porque son lo que llamamos el canario en la mina de carbón” (the canary in the coal mine), cuenta Alava, refiriéndose a una común práctica que tenían los mineros ingleses en el siglo pasado de internar a un canario en las minas que querían explotar para saber si había gases tóxicos o no. Si el canario sobrevivía, podían entrar; si no, dejaban la mina quieta. Con el pingüino de Galápagos sucede algo similar: al estar en uno de los escalones más altos de la cadena trófica, su salud puede indicar también qué tan sano o contaminado está el ecosistema.
El problema, continúa el investigador, es que “no es ético ir y sacrificar un pingüino para abrirlo”. Estos pingüinos, los de Galápagos, son escasos. Una especie única, pero en peligro. Se estima que actualmente solo hay alrededor de 1.200 individuos y son conocidos por ser el único pingüino tropical en el mundo que existe sobre la línea ecuatorial. Lo que tuvieron que hacer, entonces, fue recoger muestras de todo lo que rodea a estas aves para predecir, a través de un modelamiento ecosistémico, si los microplásticos se estaban bioacumulando y biomagnificando en los pingüinos. Y aquí hay que hacer una pausa, porque hay una diferencia. Mientras la bioacumulación se refiere al incremento que tienen los microplásticos en un organismo a través de todo a lo que se expone en el ecosistema en el tiempo -no solo sus presas-, la biomagnificación implica conocer cómo el contaminante se va amplificando en cada organismo o nivel trófico a través de la red trófica marina.
La hipótesis, dice el estudio, es que “los organismos de los niveles tróficos superiores o los depredadores del ápice muestran concentraciones más altas en comparación con los organismos de niveles tróficos inferiores”.
En Galápagos estuvieron durante 15 días. Allí, moviéndose entre las islas más habitadas, como Santa Cruz, y las casi prístinas, como Isabela, tomaron muestras de agua, de zooplancton, de peces que comen los pingüinos y que consiguieron en los mercados, y dos muestras del excremento de estas aves marinas, todo con permisos del PNG.
La idea, como cuenta Alava, era usar los datos sobre microplásticos que encontraron en cada una de estas muestras para luego incorporarlas en un complejo sistema de modelación que no solo les diría si los microplásticos se estaban bioacumulando y biomagnificando, sino que les permitiera jugar con ciertas variables y escenarios para conocer cómo cambiarían estos criterios si llega a haber más o menos microplásticos alrededor de Galápagos.
Sacar los resultados de las muestras fue una tarea internacional. En las instalaciones del Parque Nacional Galápagos que hay en las islas filtraron las muestras de agua. En el laboratorio de Ecotoxicología y Salud Ambiental de la Espol, liderado por Paola Calle, otra de las coautoras del estudio junto a Karly Mcmullen, Félix Hernán Vargas, Omar Alvarado y Evgeny Pakhomov - que fue publicado en ‘Plos One’, procesaron las muestras para eliminar el material orgánico.
EL DETALLE
Evidencia. Estudio determinan que las Galápagos no han sido inmunes a las partículas de plásticos flotantes que lo inundan todo.