¡‘Choro TV’!
Según Juanita Díaz y su hijo, el hombre hace un mes entró a su casa y se les llevó varios equipos.
“Mami ven a ver esto”, pidió el joven a Juanita Díaz para que ella pudiera identificarlo. “No olvidaría esa cara jamás”, señaló la mujer, cuando llegó a la Unidad de Flagrancias del norte de Quito para asentar la denuncia en contra del sospechoso.
Y es que Christian Díaz estaba recostado, mirando la televisión, cuando reconoció al sujeto que les robó. No lo dudó ni un segundo, el pillo que aparecía en el noticiero era el mismo que hace cuatro semanas entró a su casa y se sustrajo, presuntamente, más de mil dólares en equipos.
Fue el domingo cuando la Policía lo detuvo. Al parecer, estaba involucrado en un robo a una turista rusa, cerca de la iglesia de la Basílica, centro de la ciudad. Las autoridades lo identificaron como Pedro Venancia, de nacionalidad peruana.
Juanita y su hijo viven a pocas cuadras de esa capilla turística y cuentan cómo el implicado les hizo pasar tremendo susto.
Era una mañana soleada y la señora aprovechó para lavar la ropa. Al terminar la tarea y con su nietecito de dos años en brazos ingresó a la casa.
De repente, escuchó pasos y, lentito, caminó hacia la escalera llamando a Christian, quien minutos antes había salido de la vivienda. “Pensé que mi hijo se había olvidado algo y por eso había
regresado. Entonces vi a ese señor...”, explicó Juanita. Frente a frente: un tipo gordo, de cabello crespo, saco beige y pantalón negro, se detuvo en seco. La miró perplejo y le dijo: “Vine a visitar a la comadre”.
Pero Juanita molesta le reclamó que en esa casa no vivía ninguna comadre de él. Acorralado, el implicado la empujó y huyó corriendo.
“Apenas alcancé a tomarme del pasamanos, porque me hubiera caído con el guagua”, detalló.
A la llegada de sus hijos, la adulta mayor les contó sobre lo sucedido y Christian recordó al hombre que deambulaba por la cuadra cuando salió del inmueble, él también lo había visto antes.
“Miraba en una casa, timbraba en otra, luego se cruzaba la calle muy raro”, indicó. La familia revisó el piso de arriba y encontró los cajones abiertos sin sus aparatos.