¡Enterrado en el lodo!
A un extranjero lo contrataron para que limpiara una cisterna con otro. Se soltó accidentalmente la cuerda que lo sujetaba y murió adentro.
Miembros del Cuerpo de Bomberos t uvieron que utilizar mascarillas y equipos de oxígeno para poder recuperar el cadáver de Alexander Payares.
El venezolano, de 48 años, sufrió un accidente de trabajo dentro de un pozo, de donde iba a extraer el lodo que estaba acumulado.
La mañana del martes, el extranjero y otro allegado fueron contratados por el propietario de un predio, ubicado en la parroquia de El Quinche, sector Iguiñaro, al oriente de Quito.
El trabajo que debían realizar los dos hombres era limpiar una cisterna y debían utilizar un motor para succionar la poca cantidad de agua que había en el interior.
Alexander, como medida de ‘seguridad’, antes de ingresar al pozo, se puso botas de caucho y se colocó una soga alrededor de la cintura, mientras su compañero que se quedó en la parte exterior lo sostenía.
La sorpresa para el amigo que sujetaba la cuerda fue que su pana no contestaba a los llamados, haló la soga y se dio cuenta que no sujetaba al compañero. Eso llamó su atención, causando gran preocupación y decidió ingresar para ver qué sucedía.
En medio de la oscuridad divisó el cuerpo de Alexander enterrado en el lodo.
Asustado salió desesperado a pedir ayuda a los moradores del sector, quienes se dieron cuenta que era mejor llamar a los Bomberos para que recuperen el cadáver del infortunado extranjero.