Tiempo de arrepentimiento y cambio de vida
Algunas tradiciones se han perdido en nuestra sociedad, pero la Iglesia trata de mantener vivo el camino hacia Jesucristo.
La Cuaresma es tiempo de perdón y de reconciliación fraterna. El pasado miércoles inició este periodo que dura 40 días, en el que la penitencia rememora el ayuno que Jesucristo realizó en el desierto. Con la colocación a los feligreses de una cruz de ceniza en la frente, los cristianos entran en una etapa espiritual en la que predomina la reflexión, pero también la penitencia, de arrepentimientos de los pecados, cambiar nuestras vidas, como preparación para la celebración de la Pascua.
El color litúrgico que se utiliza en este tiempo es el morado, que significa luto y penitencia.
Al ser el Miércoles de Ceniza el inicio de la Cuaresma, y la Cuaresma el tiempo de preparación para la Pasión de Cristo mediante la reflexión, la Iglesia católica pide a sus feligreses que oren y realicen ciertos sacrificios: el ayuno y la abstinencia tanto el Miércoles de Ceniza como todos los viernes posteriores hasta el Domingo de Resurrección.
En nuestro país, algunas tradiciones se han perdido con el paso de los años como la recolección de alimentos, una semana antes del Viernes Santo, para compartirla entre los vecinos del barrio; también las largas jornadas de oración en familia que se realizaban en los hogares, las emisoras radiales cambiaban sus programaciones de música profana por la clásica o sacra, asistir a los balnearios o a fiestas, entre otras cosas.
¿NO COMER CARNE?
El ayuno consiste en hacer una sola comida fuerte al día, mientras que la abstinencia se basa en no comer carne. Según explica la web catholic.net, la abstinencia es obligatoria a partir de los 14 años y, el ayuno, de los 18 a los 59 años. Los católicos entienden que, mediante estos sacrificios, se purifican y piden “perdón a Dios por haberlo ofendido” y le dicen “que queremos cambiar de vida para agradarlo siempre”, agrega el portal católico.
NUESTRA COMIDA
La costumbre de no comer carne los viernes despertó la creatividad de los ecuatorianos, quienes encontraron en los mariscos, granos, entre otros ingredientes, la base principal para la preparación de dos sopas especiales por la Cuaresma.
La fanesca y el viche de mariscos son los ‘reyes’ de las mesas durante la Semana Santa. Ambos comparten ingredientes como el pescado, choclo y habichuela, y son solicitados tanto en la Sierra como en la Costa.