Inseparables en la desgracia
La lluvia en la capital cae pertinaz, algunos corren para guarecerse bajo las viseras de los locales comerciales de la calle América, pero no todos.
Nelson Almeida y su madre Luz María se cubren con un plástico blanco y rehuyen a quienes quieren acercarse. “Estamos bien, ya mismo nos vamos a Guayaquil”, grita el hombre.
Su madre, casi escondida debajo de una cobija azul, también dice que tienen planeado ir a esa ciudad con unos parientes. Pero su voz es más tenue que la de su hijo.
Ellos se asentaron en el parque Las Tolitas, ubicado en la avenida América y Santa Prisca, en el centro de Quito.
“No molestan a nadie, aunque la señora es un poco brava”, manifiesta Eva Calle, moradora de la zona.
Los vecinos prácticamente han convivido con Nelson y Luz. Los han visto caminar por las calles del centro desde hace varios años, aunque desde hace un poco más de un mes casi no se mueven.
“La mamá está enferma, se quedó ciega y por eso
pasa todo el día sentada”, comenta Eva.
Vecinos les han regalado comida o ropa, aunque algunos grupos de religiosas también se han acercado para darles algo caliente para tomar o comer, según la mujer.
Siguen reacios. “Ya voy a buscar plata y me voy de aquí”, dice el hombre en medio de algunas cajas viejas y tarrinas.
Según Abel Tello, ellos se le acercaron para pedirle ayuda, quieren encontrar a un pariente que es policía. “Dijeron que llevan 18 años viviendo en la calle”, comenta Abel, quien se desempeña como comerciante. Él los encontró en uno de sus recorridos para buscar clientes.
“Quieren que los ayude a encontrar a su familiar que se llama Patricio Alarcón”, cuenta. La lluvia en la ciudad sigue cayendo y de lejos se pueden ver los zapatos de Nelson que se mojan. “El invierno ha estado fuerte últimamente, da mucha pena ver como están ahí solo bajo un plástico”, dice Eva.
Según ella cuando los han llevado a algún albergue siempre regresan a lo que consideran su casa. “Sería bueno que algún familiar les preste ayuda y los saque de la indigencia. Están solos”, afirma.