Seis casos se han registrado en el año
EXTRA envió un cuestionario a la Empresa Eléctrica Quito (EEQ) para conocer su posición sobre el tema. La institución indicó que cuando les reportan electrocuciones, estas son direccionadas a la Procuraduría Institucional de la EEQ para preparar la denuncia de accidente. Luego se genera un pedido de inspección al área técnica para verificar las distancias entre redes de distribución de energía eléctrica y las edificaciones.
“En este caso en particular, una vez realizada la inspección, se recogieron, además, versiones de varios moradores del sector, con el propósito de identificar el lugar específico del accidente”, describe el documento remitido por la EEQ. En este también se refiere que cada inspección oscila entre 30 a 60 minutos y que los accidentes por electrocución suceden por el irrespeto de la ciudadanía a ordenanzas municipales para uso de espacio público y de distancias mínimas de seguridad de conductores eléctricos a edificaciones, que es de 2,5 metros. Las organizaciones municipales son las que tienen potestad de sancionar. Hasta pueden derrocar las construcciones que infringen las normas.
Respecto a las cifras, en lo que va del año, se han presentado seis casos similares. Ante esto, la EEQ toma medidas como: realizar el cruce de la red hacia la otra acera, o cortar el circuito y alimentar desde otro punto para evitar futuros riesgos.