¡Sisa, la sobreviviente!
Animalito es un símbolo para los moradores del sector que se sienten ahora inseguros. ¡Temen que los pillos se descaren!
Comosihubi ese visto al mismísimo demonio, hallamos temerosa a Sisa, la perrita mestiza que caminaba sobre los escombros de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de la 24 de Mayo, en el Centro Histórico.
Ella era la mascota de aquella unidad de policía que la noche del lunes destruyeron unos vándalos.
La rotura de los vidrios y las puertas, las llamas provocadas por la incineración de un vehículo y ver cómo sacaban cosas del lugar asustaron a Sisa que se escondió debajo de una cama.
La vecina Daniela (nombre protegido) la rescató. Cuando las cosas se calmaron y pudieron ingresar al sitio, ella la observó ‘bañada’ en ceniza. Lloraba como una cachorrita.
La llevó a su casa, que está en el condominio aledaño a la UPC y que también sufrió daños, para asearla y darle un poco de alimento. Sin embargo, la perrita no quería probar bocado. Estaba triste.
Vivía en esa unidad policial desde hacía unos siete meses, cuando los agentes la encontraron en la calle bastante flaca. La llevaron a vivir con ellos y engordó poco a poco, ya tenía un techo y comida asegurados. Era feliz.
¿Cuál será el destino de Sisa? Por lo pronto, Daniela la tendrá en su casa mientras las cosas se calman y los uniformados pueden nuevamente hacerse cargo de ella.
PUNTO CRÍTICO
El ambiente en el sector continúa siendo tenso. La falta de presencia policial, precisamente por la quema de la unidad, ha hecho que la delincuencia y la venta de droga se acentúen nuevamente.
Una moradora aseguró sentirse preocupada. “Por que por ahora hemos quedamos sin resguardo”.
“Sin los policías ya no vamos a estar protegidos (...) ahora va a haber más rateros e inseguridad”, sentenció la señora, quien lleva 20 años viviendo en el barrio.
En el tiempo que ha residido ahí, ha visto cómo han robado a un sinnúmero de personas. La puerta de ingreso a su edificio quedó dañada, por lo que quienes lo habitan tienen miedo de ser presas de la delincuencia. En las noches casi no duermen porque se organizan para hacer vigilias.
La anónima mujer también estaba preocupada porque una parte de las instalaciones del Guagua Centro, de la calle Chimborazo, fue dañada. Saquearon equipos, material didáctico y alimentos.
“Allá iban los niños del mercado (San Roque), ahora ¿adónde van a ir ellos?”, se preguntaba.
Papeles quemados, pedazos de vidrio, basura, palos y cintas con la palabra “peligro” quedaron como la imagen de aquellos lugares, en donde antes estaban niños aprendiendo y uniformados a quienes los vecinos pedían auxilio en caso de alguna emergencia.
7
MESES llevaba viviendo la perra con los uniformados.
✓DETALLE
La ministra de Gobierno, María Paula Romo, condenó este hecho en Twitter: “Esto no es un paro... está organizado”.