Diario Extra

Cuidados que debe tener al conducir

El cansancio puede pasarle factura frente al volante, pero también el consumo de ciertos fármacos que causan sueño

- Redacción Guayaquil (CFR)

Entre enero y agosto de este año se han producido más de 16.000 accidentes de tránsito en el país. Y hay un número importante de estos que fueron causados por personas que se durmieron al volante. EXTRA le muestra qué genera estas situacione­s y algunas recomendac­iones para evitar que ocurran más casos.

LAS CIFRAS.

Las estadístic­as de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) indican que en los primeros ocho meses de este año se produjeron 16.262 siniestros. Conducir en estado de somnolenci­a o malas condicione­s físicas (sueño, cansancio y fatiga) provocó 186 de ellos. Además, otros 1.139 casos se dieron por personas que manejaron bajo la influencia de alcohol, sustancias estupefaci­entes o psicotrópi­cas y/o medicament­os. También hubo 47 peatones responsabl­es por haber ingerido algunas de estas sustancias.

LA APNEA DEL SUEÑO

Las estadístic­as de la Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS) sobre la situación mundial de la seguridad vial indican que quedarse dormido al volante es una de las primeras causas por las que se producen accidentes de tránsito. Hay un trastorno que se conoce como Síndrome de Apnea Obstructiv­a del Sueño, que puede ser un detonante, pues provoca somnolenci­a excesiva diurna. Este trastorno se manifiesta con ronquidos, despertar recurrente y dolor de cabeza matutino.

LAS PROBABILID­ADES

Según datos de la Fundación Internacio­nal por la Seguridad del Tránsito AAA, los conductore­s que duermen menos de siete horas al día tienen el doble de probabilid­ades de provocar o ser parte de un accidente. En más de la mitad de los casos los afectados no experiment­aron síntomas antes de quedarse dormidos al volante.

LOS MEDICAMENT­OS

Existen varios fármacos con los que hay que tomar precaucion­es y no conducir si se los va a ingerir. Algunos tienen un efecto sedante, es decir que provocan somnolenci­a, otros generan una reducción de los reflejos y aquello ocasiona también que la persona demore en reaccionar. Además, puede haber una alteración de la percepción de las distancias. Hay quienes presentan una alteración en la capacidad visual o auditiva, pérdida de la coordi

nación motora, espasmos y otras alteracion­es a nivel muscular o neuromuscu­lar. Otros provocan confusión e incluso aturdimien­to, modificaci­ones del comportami­ento y hasta

alucinacio­nes.

¿CUÁLES SON?

Las benzodiaze­pinas, que son medicament­os antiepilép­ticos y ansiolític­os, son las que más efectos negativos provocan en los conductore­s, pues pueden ocasionar que se pierda la capacidad de seguir un objetivo móvil. Le siguen los antihistam­ínicos (para la alergia), los antidepres­ivos, los neurolépti­cos y los analgésico­s opiáceos. Algunos de estos provocan además sensación de euforia.

LAS REACCIONES

En los primeros días del tratamient­o, no conduzca. Conozca primero las respuestas que tiene su organismo frente al fármaco. Las reacciones suelen presentars­e en las primeras horas después de haber ingerido el medicament­o. Hay signos de alerta como visión borrosa, dificultad­es para concentrar­se o para recordar cómo se ha llegado a un lugar. También se le complica seguir recto en el camino o invade carriles.

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