¡Darán terapia de shock, che!
Intentará revertir la mala situación en esa nación austral.
Tras el vuelco político, el vuelco económico. El futuro gobierno de Alberto Fernández quiere manejar Argentina de forma muy distinta, y el Banco Central empieza a adecuarse: anunció que a partir de hoy patrocinará un descenso de los tipos de interés y pondrá fin a la alta remuneración de las Letras de Liquidez (Leliq) con las que se intentaba contener tanto la inflación como la depreciación del peso.
La nueva estrategia se dirige a estimular el consumo interno y el crédito, pero puede disparar aún más el alza de precios. “Vienen años muy difíciles”, dijo el presidente electo.
Fernández anunció que lucharía contra el hambre y a favor de la enseñanza pública, la sanidad pública y los derechos de los trabajadores.
“Necesitamos recuperar la dignidad”, dijo. Añadió que Argentina sería “un país gobernado por un presidente y 24 gobernadores” y que construiría “una auténtica Argentina federal”. Anticipó también que batallaría a favor de la legalización del aborto, uno de cuyos principales opositores es precisamente el gobernador de Tucumán, Manzur, representante del peronismo más conservador y opaco.
Fue su primer discurso formal tras la victoria en las elecciones.
Alberto Fernández subrayó que asumiría la presidencia de una Argentina “con muchos problemas más allá de la deuda” y que los próximos años serían “muy difíciles”.
La recesión argentina pronto cumplirá dos años. Solo se utiliza el 60% de la capacidad industrial, el consumo no deja de disminuir y la tasa oficial de desempleo, 10,5%, encubre una gran cantidad de subempleo. El 35% de los argentinos vive en la pobreza.
El nuevo gobierno, que asumirá el 10 de diciembre, necesita un shock que reactive la actividad económica.
Fernández aspira a conseguirlo por una vía que permaneció cegada durante el mandato de Mauricio Macri: una baja de los tipos de interés que permita a las empresas volver a disponer de crédito bancario accesible.
DATOS
Los argentinos están preocupados por la grave situación económica que atraviesan .