¡MURIÓ DENTRO DE LA NEVERA!
Allegados lo encontraron en ese electrodoméstico tiempo después.
La noticia parece sacada de un mundo paralelo al de nuestros tiempos y es que Ángel Huayracajas, de 32 años, encontró la muerte, ni más ni menos, dentro de un congelador descompuesto.
El fiscal del cantón Colta, en la provincia de Chimborazo, Marco Tenemaza, informó que la autopsia determinó que la causa de su deceso fue asfixia.
Al llegar y realizar las respectivas pericias, agentes de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) establecieron que el ciudadano se habría metido en el congelador por su propia voluntad.
A lo mejor para guarecerse del frío intenso que hay en ese sector, frente a la laguna, cerró la puerta y se quedó dormido. No midió las consecuencias por su estado de ebriedad, por lo que fallece asfixiado”, explicó el fiscal.
De acuerdo con las versiones dadas por fuentes oficiales, el cuerpo de la víctima no presentaba golpes o magulladuras. Por esto, una de las versiones más aproximadas a la realidad es la que hace presumir de que su muerte ocurrió de manera accidental.
Sin embargo, también se investiga si el hombre, por su presunto estado de embriaguez, no pudo localizar su dormitorio o tal vez se confundió y en vez de ingresar a su cuarto lo hizo a una bodega que está ubicada afuera del inmueble y en donde se guarda el congelador que está averiado desde hace mucho tiempo.
Tras las diligencias respectivas, el cadáver fue trasladado a la morgue de Riobamba hasta donde acudieron sus seres queridos, quienes lloraban sin consuelo su muerte inesperada.
“Es una pena, su esposa siempre lo salía a buscar, de noche o a la hora que sea, pero no sabía dónde estaba, ahora se queda sola”, manifestó una tía materna, quien no quiso identificarse, pero que se mostró confundida en extremo luego de saber esta mala noticia que enluta su hogar.
Luego de la autopsia, los restos fueron trasladados hasta la comunidad Colta Monjas para darle el último adiós. “Estamos ayudando con los trámites, eran vecinos, ya este rato así les ha tocado en la vida, no se puede juzgar, sino ser solidarios ante la desgracia”, señaló Juan Altamirano, amigo de la víctima.
Los familiares, allegados y seres queridos se congregaron para darle el último adiós a este hombre.
La mayoría de ellos no daba crédito a lo sucedido y, por el contrario, manifestaban su interés en que todo quede claro.
En el lugar de los hechos no se encontró mayores indicios para la investigación.
Lo único cierto es que la ciudad de Colta bebe un trago amargo por cuenta de la tragedia que se desencadenó en el lugar de los hechos.
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SEMANA podría haber estado en la nevera desde que desapareció.
DATO
Se presume que el hombre se quedó dormido hasta que llegó ‘la huesuda’ para llevárselo.