Lo sepultaron con música y ‘bielas’
Joven que falleció un mes después de un accidente pidió que en su funeral sea llevado a su bar preferido y en su ataúd coloquen una jaba de cervezas.
Con ‘bielas’ y visitando su bar preferido se realizaron las honras fúnebres de Santiago Ricardo Silva Sesme, de 23 años, quien tuvo un accidente en la vía a Salitre el pasado 23 de noviembre y que falleció este fin de semana en una casa asistencial de Guayaquil.
El día del percance el joven circulaba en una motocicleta por la vía La T – Salitre, en la madrugada, cuando fue impactado por un automotor no identificado. Él quedó herido con politraumatismos en su cráneo y cuerpo.
La mañana de ayer se realizó su funeral. El ataúd fue sacado en hombros por sus amigos y en el cortejo fúnebre desde su natal recinto La Clemencia hasta la iglesia se escuchaban canciones rocoleras, baladas y bachatas.
Tras culminar la misa de cuerpo presente en la iglesia San Andrés, de la parroquia Juan Bautista Aguirre, el ataúd fue escoltado por motocicletas y camionetas.
Antes de llegar a la que sería su última morada sus familiares y amigos cumplieron con la promesa que le habían hecho al joven.
Él había solicitado que el día de su funeral sea llevado al bar de la T de Daule, donde se divertía en sus momentos libres; además antes de ser sepultado debían colocar una jaba de cervezas en su ataúd.
“Y le cumplimos. La partida de mi primo nos deja un gran vacío a la familia, pero cumplimos su último deseo”, expresó Julio Silva.
En el bar donde era cliente, al son de las canciones ‘Por algo me han de recordar’ y ‘La culpa del destino’, fue el homenaje póstumo.
Alzando sus copas sus amigos de bohemia trataban de calmar el fuerte dolor de la inesperada partida de su ‘pana’.
Ya en el camposanto, el dolor invadió los rostros de los asistentes. Gladys Sesme no podía contener las lágrimas al ver que su hijo era ingresado a su casa eterna, pues hasta el último momento Ricardo luchó por su vida, pero la muerte le ganó la batalla.
PROMESA El bar ubicado en la T de Daule fue el sitio donde se realizó el homenaje póstumo al joven de 23 años.