¡PELOTEO DE GLORIAS!
Figuras como Agustín Delgado, Édison Méndez, Ulises de La Cruz, Jhegson Méndez, Jeison Chalá, entre otros, protagonizaron un partido amistoso en la cuna del deporte ecuatoriano.
Llegaron Édison Méndez, Agustín Delgado, Cléber Chalá... de los más recordados del 2000.
Se enfrentaron a estrellas vigentes, todo esto frente a cientos de espectadores.
Las tribunas de la liga parroquial del Juncal (provincia de Imbabura) no fueron suficientes para albergar a tanto público. Decenas de aficionados que se dieron cita para ver el partido amistoso entre viejas glorias del fútbol y jugadores jóvenes optaron por ubicarse en el puente de dicha población, incluso sorteando el tránsito vehicular.
La jornada Partido de las Estrellas reunió a exjugadores como Édison Méndez, Agustín Delgado y Carlos Tenorio, entre otros. Ellos formaron parte del equipo de los ‘antiguos’, mejor conocidos como Los rosados (esto porque los clubes no tenían nombres, sino que se reconocían solo por el color de sus uniformes). Los cuarentones saltaron a la cancha como si ni un día les hubiera pasado por encima.
Desde el fondo de la zaga, Giovanny Espinoza hizo honores a su sobrenombre, Sombra, porque recordó sus épocas como uno de los mejores defensas del país. Sin embargo, algo que llamó la atención de este ibarreño fue que lució casi irreconocible a causa de todo el peso que ha perdido desde que se retiró hace seis años.
Los rivales de los ‘viejitos’ fueron Los verdes, un equipo conformado por las glorias actuales del fútbol nacional. Y, debido al carácter amistoso de este cotejo, no hubo reclamos al árbitro, peleas o faltas agresivas. Al contrario, sobre la cancha los jugadores se hicieron bromas entre ellos.
Agustín Delgado llegó a la cancha del Juncal cuando el partido ya había empezado (el Quinito también llegó atrasado y alborotado y, al igual que el Tin, no necesitó calentamiento e inmediatamente saltó a la cancha). Apresurados, se enfundaron en su uniforme rosado y, aún con el tiempo encima, se dieron tiempo para sacarse fotos con sus seguidores. “¡Como en los viejos tiempos!”, les gritaban varios hinchas.
Y, pese a su inactividad futbolística desde hace más de cinco años, el Tin y el Quinito recordaron por qué fueron grandes elementos de la Tri. Protagonizaron esas jugadas de la Selección de inicios de los 2000, en las la que Méndez habilitaba a Delgado quien, luego, remataba al arco.
Pero ni siquiera el buen estado físico de los cuarentones (entre los cuales también estuvo
Ulises de La Cruz) bastó para que pudieran lucirse ante las jóvenes promesas. El primer tiempo terminó sin goles, pese a los insistentes ataques.
Una de las figuras de Los rosados fue el arquero Sandro Borja, quien a sus 46 años todavía mantiene los instintos intactos en la meta y logró atajar, al menos, tres disparos de los hermanos Jeison y Walter Chalá, quienes militan en las filas de Universidad Católica y comandaron el ataque verde. Ni el mismo Sandro de América pudo mantener en cero sus redes, puesto que, a los 65 minutos, los jóvenes se adelantaron en el marcador por intermedio de Raúl Guerrón, sobrino de Joffre Guerrón (ambos fueron rivales en esta jornada).
Pero, cinco minutos después, fue precisamente el mismo Joffre quien sentenció el resultado por 1-1, con un potente remate desde fuera del área, que el golero Erick Viveros, de Liga de Quito, no pudo detener.
La hinchada celebró tanto el gol verde como el rosado. Los aficionados no apoyaban a ningún equipo, sino que fueron a ver a los clubes de dos diferentes generaciones. Por eso, al acabar el cotejo, todos los jugadores fueron ovacionados.
Cléber Chalá, Méndez y el mismo Tin fueron los más ‘figuretis’. Se quedaron hasta una hora después de que acabó el cotejo para complacer a sus seguidores con fotografías y autógrafos.