¡Hasta los árboles son débiles ante las lluvias!
El descanso de la familia de Fernando Mora, que habita en la cooperativa 25 de Julio, sector San Eduardo, se interrumpió por un remezón acompañado con el corte de energía eléctrica. Eran cerca de las 7:00 cuando los seis miembros del hogar abandonaron la cama para salir de la casa en medio de la lluvia y buscar un sitio seguro.
Pensaban que era un sismo o un deslave, ya que el inmueble está en las faldas de un cerro. El susto lo protagonizó un árbol que cedió, producto de las lluvias, y cayó sobre el cableado de luz.
“Por suerte, los cables no cayeron en el interior de la vivienda, sino la historia fuese otra”, indicó Fernando a Diario EXTRA, mientras abrazaba a su esposa Cinthya Fernández y a sus cuatro hijos. Personal del Cuerpo de Bomberos y de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) retiraron el árbol, que además dificultaba el paso de los habitantes.
Otro árbol cayó sobre la calzada del kilómetro 23 de la vía a la costa, dificultando la circulación de los vehículos que en la mañana se dirigían a los balnearios.
En el norte de Guayaquil, los moradores de Sauces 4 y 5 también tuvieron inconvenientes para salir de las casas, debido a que amanecieron inundadas avenidas como la Antonio Parra Velasco e Isidro Ayora.
Los vehículos que tomaban la ruta que conecta el kilómetro 10 de la vía a Daule tuvieron inconvenientes, debido a la laguna que se forma en dos puntos.
Lo mismo ocurrió en la avenida que conecta con el camposanto Jardines de Esperanza.
En el suburbio, las familias que habitan en las calles Colombia y la 17 también tuvieron inconvenientes para salir de sus hogares, por el agua empozada.