AHORA ESTÁ ARREPENTIDO
La víctima lo dejó por alcohólico, según consta en la denuncia. Admitió que les dio de beber una sustancia.
Tres meses antes de su muerte, Adriana Alexandra Camacho Bermúdez habría terminado la relación sentimental que mantenía con su conviviente, Érick Ortega Narváez. El motivo: No soportaba su adicción al alcohol.
Sin embargo, él la convenció de retomar el noviazgo, pues le aseguró que estaba asistiendo a un grupo de alcohólicos anónimos, pero al parecer recayó en el vicio y cansada de esto, el 20 de febrero pasado, Adriana decidió poner fin al amorío.
Así consta en la denuncia que Patricia Bermúdez, madre de la víctima, puso en la Fiscalía del Guayas.
Cinco días después la mujer y su hijito, de 6 años, fueron encontrados muertos sobre la cama, en el interior de su vivienda, en la manzana A4 de la ciudadela Pradera 1, en el sur de Guayaquil.
Por los indicios que se encontraron en la escena: medicamentos y dos envases plásticos que contenían residuos de un líquido, los investigadores sospecharon que la mujer envenenó a su niño y que luego ella se mató, mas los hechos también conducían a que podría tratarse de un doble crimen y el principal sospechoso era el conviviente de Adriana.
Un vídeo de seguridad captó al hombre abandonando la vivienda, llevaba varios objetos envueltos en sábanas, esto ocurrió a las 10:11 del lunes.
Quince horas después Ortega fue detenido en un parque de Montañita, en la provincia de Santa Elena.
El teniente coronel Telmo Betancourt, jefe de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida y Muertes Violentas, Dinased Zona 8, indicó que el implicado fue localizado por una llamada telefónica que hizo a su mamá.
“Él le manifestó que estaba arrepentido de lo que le hizo a su conviviente y al niño y que quería despedirse de ella”, informó el jefe de la Dinased.
Betancourt explicó que durante la audiencia de formulación de cargos Ortega relató que les dio una sustancia y que había tomado ciertas acciones por su situación emocional.
El jefe de la Dinased agregó que sus familiares manifestaron que el individuo sufre de alteraciones, “pero se determinará con exámenes”, sostuvo Betancourt.
Lita Martínez, directora del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer, Cepam, reveló que, al parecer, la madre y el niño fueron envenenados.
También señaló que Patricia, mamá y abuela de los fallecidos, es conocida por su afán de lucha social en favor de las mujeres que son víctimas de violencia.
Recalcó por versión de familiares y amigos de Adriana que ella vivía en una situación de violencia.
“Sabemos que hubo una relación de poder, de violencia, ellos estuvieron separados y volvieron a vivir juntos, en la última decisión de terminar la relación él consumó el hecho no solo contra ella, sino de su hijo”, manifestó Martínez.
Hasta las 13:00 de ayer, los restos de Adriana y de su niño fueron velados en la sala de velación de la Junta de Beneficencia, luego fueron sepultados en el Cementerio General de Guayaquil.
EL SOSPECHOSO
Érick Ortega no tiene antecedentes penales, pero presenta una demanda por alimentos, en el 2018.
Así opina
Por versiones de familiares y amigos de Adriana se conoció que ella vivía en una situación de violencia”.