La situación se agrava en los hospitales
Quito es la ciudad que presenta más contagios de coronavirus a nivel nacional con 71.989 casos positivos. Le sigue Guayaquil con 20.339.
Por si fuera poco, la nueva variante del virus confirmada en Los Ríos provoca miedo en la población y genera incertidumbre en los expertos.
El incremento de casos de COVID-19 ya se evidencia en los centros de salud capitalinos. Las áreas de hospitalización se empiezan a llenar otra vez con personas que llegan con síntomas respiratorios.
En el Hospital IESS Quito Sur, el que atiende a más del 70% de casos de Pichincha, el número de personas que llega a emergencia aumentó. Hace un mes recibían 100 pacientes y ahora 160.
Paúl Jiménez es uno de ellos. Él llegó la mañana de ayer para realizarle las pruebas PCR a dos de sus hijos y a su esposa para descartar que se hayan contagiado. “A mí me detectaron el virus hace unos días”. Francisco Mora, coordinador de vigilancia epidemiológica del hospital, indicó que de cada 10 test que se realizan, 8 dan positivo.
A 20 minutos de ahí, en el
Hospital Enrique Garcés, el área de emergencia respiratoria volvió a recibir pacientes luego de dos semanas de permanecer casi vacía. En el Pablo Arturo Suárez, norte de Quito, las salas de cuidados intensivos están colapsadas al igual que en el hospital Carlos Andrade Marín.
Por esto, Alberto Narváez, PHD en políticas de salud, aseguró que el gobierno debe tomar acciones porque el sistema de salud colapsará con los contagios de la nueva variante que, según el experto, es seis veces más contagiosa que las otras variantes.
Su proyección para la capital es dramática. “Si seguimos así habrá hasta 60 muertos diarios en Quito y 300 a nivel nacional”, comentó.
En Guayaquil, la situación no es diferente a la de la capital. En cuestión de fallecidos se reportan hasta diez diarios, que podrían llegar hasta cuarenta, señala Narváez. Sin embargo, la transmisión en el Puerto Principal podría ser más lenta, aunque todavía se espera las personas que se contagiaron en los festejos del triunfo de Barcelona y del feriado de fin de año.