Hacen ‘fiesta’ con las mallas
Tienen de ‘pato’ a bienes de tres vías del norte de Guayaquil y a un mercado del suroeste.
La inseguridad que tiene ‘de cabeza’ a Guayaquil no solo afecta a los habitantes, también a sus estructuras metálicas. Se las ‘patean’.
Hasta el año pasado, las mallas sobre los muros divisorios de la Perimetral eran las primeras víctimas de pillos disfrazados de recicladores o de moradores que argumentan dificultades para cruzar la vía rápida, pese a la cercanía de pasos elevados.
Ahora resulta que sujetos ingresan al perímetro urbano. Están a la cacería de bienes públicos de zonas residenciales y regeneradas.
Como ejemplo están las armaduras de las avenidas del norte, como Las Aguas, Felipe Pezo Campuzano y Francisco de Orellana; así como de los exteriores del mercado minorista de mariscos de la calle Portete, en el suroeste.
Las estructuras han sido colocadas precisamente para dar seguridad y evitar que transeúntes se arriesguen a cruzar por los tramos más conflictivos. Pero eso poco o nada importa a esas personas, quienes ‘en corto’ se ‘chorean’ las piezas en partes para luego venderlas baratitas a recicladoras.
Las evidencias están a la vista: enormes huecos, metales torcidos, tuercas sobre el piso y bases levantadas.
“Guayaquil es tan inseguro que hasta el metal y el cemento termina siendo atractivo para el delincuente”, manifestó Agustín Benavidez, habitante de la ciudadela San Felipe.
Y es que a escasos metros, en la Felipe Pezo, han desaparecido rejillas, mientras otras están dobladas, listas para el ‘choreo’. Incluso, apenas le queda uno de los cuatro tornillos que la unen al concreto.
Las estructuras son sustraídas por recicladores y chamberos, comenta el comerciante Roberto Andrade, quien vende arreglos florales en los exteriores del cementerio Jardines de Esperanza, en el mismo sector.
“Los he visto en triciclos, pasadas las ocho de la noche, cuando todo el entorno por la escasa iluminación se pone casi negro, cortando y aflojando las rejillas”, afirmó.
Señala que avisa a la policía y en varias ocasiones los han detenido. “Sin embargo, no puedo ni quiero ser el que siempre alerte. Me preocupa que luego quieran hacerme daño”.
La misma situación se observa en la avenida Las Aguas, donde incluso, a decir de los mismos residentes, hay ciudadanos que cortan de a poco las rejillas para cruzar de una calle a otra. En el lugar, hay tres espacios destinados para los transeúntes.
Sin embargo, argumentó Ramiro Paredes, habitante de Urbanor, la desobediencia y la “viveza criolla” los impulsa a cortar las redes, así dejan indefenso al vecindario.
“La gente no se da cuenta que al robar o cortar las mallas pone en riesgo a la comunidad. Con tremendos huecos, los peatones cruzan en los sitios donde no hay semáforos ni señalética, y hasta los delincuentes en moto giran en U para escapar”, lamentó.
GUARIDA PARA ‘DROGOS’
A los vecinos del mercado de mariscos de la Portete les preocupa el retiro de las rejas del cerramiento, pues se convierte en guarida de delincuentes y drogadictos.
En la Perimetral, según Freddy Granda, jefe de Planificación de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM), la forma de operar de quienes se llevaban el material se desarrollaba por las noches y era de manera secuencial. “En el primer día aceran las mallas y así continúan hasta el cuarto día donde las terminan de sacar”, explicó.
El experto en seguridad Daniel Veloz indicó que los sujetos aprovechan la ausencia de cámaras o guardianes para sustraerse las piezas. “No hay tantos ojos para monitorear los espacios”, detalló.
EL DATO
Los centros de acopio que compran materiales reciclables pagan en promedio $ 0,17 por la libra de hierro, $ 0,50 por la de aluminio, y hasta $ 2,10 por la de cobre. Son pocos los controles.
Así opinan
DANIEL JACHO
Ciudadano Creo que deben brindar mayor resguardo policial a esas zonas. También deben colaborar las recicladoras y no comprar materiales dudosos”.
FRANCISCO PERALTA
Ciudadano Considero que todos debemos colaborar y evitar que delincuentes no roben las mallas. Son bienes que pertenecen a la comunidad”.