“¡Casi me la MATAN!”
El artista narra el terrorífico día que vivió su familiar en el centro de Guayaquil. Pide justicia.
Impotencia, dolor y coraje siente en estos momentos el artista ecuatoriano Héctor Napolitano. Su hija de crianza fue víctima de secuestro exprés, el domingo 29 de mayo, en los exteriores de un supermercado ubicado en las calles Boyacá y 9 de Octubre, centro de Guayaquil, a las 19:30.
Ella salía de realizar compras para su hogar, cuando un taxista, aparentemente seguro, la secuestró, golpeó y la metió a la cajuela del vehículo.
Fueron horas de terror para la mujer, de 35 años, quien agradece estar viva, pero pide justicia, ya que las secuelas no le permiten salir de su hogar sin sentir temor.
Según el parte médico de la Fiscalía, realizado el día del hecho, la víctima presentó lesiones en su rostro, ojo derecho y en la parte de su tórax posterior, las cuales son producto de un golpe “con o contra cuerpos o superficies duras”.
Todo esto provocó que le dieran de 6 a 8 días de incapacidad, salvo secuelas que se puedan presentar en días posteriores.
Héctor relata que ella llevaba aparatos de fotografía con un costo de aproximadamente 3.000 dólares. También le sustrajeron todas las compras.
Menciona que fue internada en el Hospital IESS Los Ceibos por un día, luego de que los secuestradores la dejaran tirada debajo de un puente, el cual no fue especificado, ya que la joven estaba muy desorientada por la brutal ‘paliza’ que le propinaron.
“Pediré justicia por mi hija. Ella no merece haber vivido esto. La ciudad atraviesa una delincuencia imparable y debemos gritar y pedir justicia por nuestros seres queridos. La vieron indefensa y casi me la matan. Soy un artista muy querido en el país y espero que mi voz se escuche y me apoyen. Que las autoridades den con los responsables. No descansaré hasta que paguen”, mencionó el cantante conocido como Viejo Napo.
Por ahora, la joven se recupera en su hogar, rodeada de sus familiares. Hoy tendrá una cita en la Fiscalía para ver avances en el caso, ya que le pidieron rendir nuevamente versión de lo sucedido.