“Esto es UNA GUERRA”
A gritos piden que ya termine el paro, mientras esperan que se habilite el corredor humanitario. Indígenas aprovechan para vender sus productos.
Ambato está a punto de estallar. La paciencia de los ciudadanos se acaba y hasta han llegado a enfrentarse con los manifestantes, porque no han habilitado los corredores humanitarios para abastecimiento de productos.
La madrugada de ayer miércoles 29 de junio surgieron pugnas entre personas que necesitaban pasar sus vehículos con productos de primera necesidad, pero los protestantes se lo impidieron, informó el representante de los productores de huevos en la Zona Centro, Javier Corrales.
“Esta es una guerra que durante 15 días hemos vivido. Grupo de manifestantes hirieron a mi hermano de una pedrada en la cabeza y a mí me golpearon con un machete. Gritaban que nos maten, porque pedíamos que ya se termine este paro”, reveló un hombre agredido que pidió la reserva de su identidad, ya que reside en la avenida principal donde se dan las manifestaciones.
En el centro, los comerciantes tratan de abrir los negocios y normalizar la actividad, pero los manifestantes siguen obligándolos a cerrar los locales.
En medio de esto, grupos de indígenas y campesinos han armado ferias informales en el sur, donde ofrecen verduras, legumbres, frutas y productos lácteos que ya no hay en las tiendas.
NO ASOMAN LOS SALVOCONDUCTOS
Jorge Chagmana, dirigente indígena de Tungurahua, explicó que el corredor humanitario aún no está funcionando para Tungurahua, ya que se deben emitir salvoconductos que puedan extender el paso a las provincias de Chimborazo y Bolívar, que es donde deben ponerse de acuerdo.
Reconoció que la falta de gas y suministros médicos afecta a todos y por eso iban a reunirse nuevamente con las bases indígenas por la tarde, para buscar la manera de que funcionen los pasillos de ayuda.
Mientras que a las 12:00, decenas de maquinarias se tomaron la avenida Cevallos en apoyo al paro, aseguraron los conductores.