Dominguero

Rocío Cedeño

“Aún me falta mucho por aprender ”

- Por Ivonne Lago M. lagoi@ granasa. com. ec

De fácil sonrisa y trato amable, Rocío Cedeño se ha convertido en la voz y el rostro de ‘ El noticiero’, de TC. Es una de las comunicado­ras referentes de dicho canal, que se ha ganado no solo el aprecio del público, sino que además goza de credibilid­ad. Ese respeto y confianza son el resultado de 30 años como comunicado­ra, 25 de los cuales los ha forjado dentro de TC. Psicóloga de profesión y periodista por convicción, esta labor le ha permitido abrir su corazón al llegar a muchos hogares no solo a través de las noticias, sino mediante la ayuda social para aquellos que la necesitan, convirtién­dose en un puente para los más desposeído­s.

ESTA ES UNA OCASIÓN ESPECIAL, CUMPLE 25 AÑOS EN TC.

Sí, 25 años en TC y 30 como presentado­ra de noticias y un poquito más en el mundo de la comunicaci­ón y la TV, porque empecé muy pequeñita. Me inicié en Telesistem­a ( hoy RTS), pero antes de estar ahí como presentado­ra de noticias, estuve como asistente de la asistente del asistente, así empecé en ‘ Super pelados’ y en ‘ Quien sabe sabe’.

¿ LLEGÓ COMO LO HARÍAN LOS PASANTES EN LA ACTUALIDAD?

Tenía 17 años, llegué como pasante y siempre supe que me gustaba el mundo de la TV y de la comunicaci­ón. Primero incursioné en este tipo de programas, luego me retiré un tiempo para estudiar, luego entré a Telesistem­a, formé parte de un programa que lo estaba produciend­o el señor Eduardo Holmes y después dije ‘ tengo que escuchar a mi corazón, tengo que seguir ese bichito que me dice lo tuyo son las noticias, preséntate al casting’ y así lo hice.

¿ DE QUÉ SE TRATABA ESE CASTING QUE LUEGO LE ABRIÓ CAMINO AL ÉXITO?

Una prueba en Telesistem­a porque necesitaba­n a personas para dar noticias y dije ‘ hola, aquí estoy’. Estaba haciendo otro programa, uno musical dentro del mismo canal, cuando quedaba en la Casa de la Cultura. Me presenté, me probaron y me dijeron que podían comenzar a hacer algo conmigo. Me preguntaro­n si me gustaría participar en el departamen­to de noticias internacio­nales, donde necesitaba­n a alguien y yo ni corta ni perezosa dije sí. Después estaba muriéndome de miedo, pero siempre hay alguien maravillos­o, un ángel con el que te encuentras en el camino que te ayuda.

¿ QUIÉN FUE ESE ÁNGEL QUE LE AYUDÓ?

En esa época ya trabajaban mis amigos Helen Morán y Eduardo González y el cariño que nos teníamos, el compañeris­mo era maravillos­o. Compartimo­s experienci­as muy lindas y fue así que fui incursiona­ndo. Luego fui parte de los noticieros en todas las emisiones hasta las de los domingos. También hice reportajes y documental­es. Aprendí bastante. Aprendí de los grandes.

¿ EN ESTE CUARTO DE SIGLO DENTRO DE LA COMUNICACI­ÓN A QUIÉNES CONSIDERA SUS MAESTROS?

Mi primer maestro en la comunicaci­ón fue el licenciado Teófilo Villón, un ser maravillos­o, el primero que confió en mí. Además Eduardo González, quien tenía mucha experienci­a, y una compañera que es un referente, María del Carmen de Aguayo. También está Carlos Armanza Astudillo, un excelente profesiona­l y de calidad humana. Si nos vamos más atrás, mis primeros maestros en la producción, en TV, fueron Carlos Piechestei­n, Francisco Cabanilla y Alfredo Adum Wated, con ellos tuve contacto cuando entré a este mundo mágico.

¿ CÓMO PODRÍA DEFINIR ESTOS 25 AÑOS?

Fue una época donde pude aprovechar y tener la bendición de crecer como profesiona­l acompañada por grandes comunicado­res. Si me pongo a revisar mi vida luego de 30 años, dentro de mi carrera me veo como una profesiona­l madura, que aún tiene mucho que aprender, pero de todo lo obtenido puedo decir que aprendí a tener un pie en los sueños y otro en la realidad. Antes era muy inmadura, pero uno va creciendo. Ahora sé lo que quiero, a dónde quiero ir, pero todavía hay mucho que me falta por aprender, tengo sueños e ideales, tengo vitalidad para seguir haciendo cosas.

¿ QUÉ CREE QUE AÚN LE FALTA APRENDER?

Aprender más que nada a contactarm­e con este nuevo modo de comunicaci­ón, a conectarme de mejor forma con las plataforma­s comunicaci­onales.

DENTRO DE SU EXPERIENCI­A, ¿ DE QUÉ CREE UD. QUE CARECE LA TELEVISIÓN ACTUAL, DONDE SON LOS ANTIVALORE­S LO QUE VENDE?

Sí, lamentable­mente, pero tiene de todo un poco. Por un lado está el hecho del rating a costa de lo que sea, en contenido nos falta un poquito más eso de recordar y enfocarnos en cuáles son las funciones de un medio de comunicaci­ón y cuál es nuestra responsabi­lidad de tener informació­n valiosa; nos falta tener conciencia de que somos comunicado­res y de que tenemos a cargo un medio de comunicaci­ón. Con base en esa conciencia viene el respeto y la responsabi­lidad, porque capacidad y talento hay.

CUANDO SE HABLA DE USTED, EL COMÚN DENOMINADO­R ES QUE ES UNA PERSONA SIN ESCÁNDALOS, SIEMPRE ESTÁ GUAPA Y BIEN VESTIDA.

Lo que pasa es que cuando tienes un trabajo expuesto la gente te observa, así no lo quieras, estás en la vida diaria, te expones. Por respeto a mi trabajo tengo la forma de arreglarme mejor, soy madre de tres niñas y me siento con el compromiso enorme de darles buen ejemplo. Yo no digo malas palabras, pero mis adolescent­es sí, por lo menos en la casa no se las permito y les explico que no se ve bien, lo mismo cuando beben. Les pido que tomen su copa, pero que no hagan el ridículo borrachas. Tengo que ser su ejemplo.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador