‘PÉGATE’ UN PASTEL
Sin importar la edad, sexo, clase social, este bocadillo relleno siempre será muy consumido por los guayaquileños. Es considerado parte de su costumbre gastronómica.
Hablar de los pasteles es sinónimo de cocina callejera muy popular en nuestra ciudad. No hay quien se resista a este delicioso manjar que antiguamente era conocido como `muerte lenta' y que fusiona nuestra cocina con la francesa, ya que la masa de hojaldre que se utiliza para prepararlos es de origen galo.
El chef Malfred Canales asegura que no todos conocen el origen de esta crujiente masa, que es usada tanto en América Latina como en otras partes del mundo y es muy popular para preparar recetas saladas y dulces.
“Este bocadillo es tan popular en nuestra ciudad que no hay hora fija para `pegarse un pastel'. A la voz de “pasteléate varón” o “ponte pilas con tu pastel”, son las frases más conocidas a la hora de venderlos ya sea en locales, restaurantes o la vieja usanza, en bicicletas o en carretas”, comenta el chef.
Los hay de carne, chorizo o pollo, incluso de queso, acompañados siempre de mayonesa, ají, o un simple limón. Xavier Escobar, dueño de un negocio dedicado a la venta de este producto, ha creado sus propias salsas para acompañarlos.
“Las diferentes salsas son el complemento ideal para acompañar esta delicia y claro, no puede faltar el jugo de naranja, una gaseosa o una taza de café”, explica el emprendedor.
TRADICIÓN
Los puedes encontrar desde temprano (para el desayuno), afuera de colegios o escuelas, parques, ferias, vendedores ambulantes, también existen lugares dedicados a su elaboración.
“Este producto es tan popular y consumido por los guayacos que hay lugares que se encargan de producirlos en masa y así venderlos al por mayor y que terceros los revendan a buen precio y así crear fuentes de trabajo”, asegura Canales.
Su masa está formada por ingredientes básicos como la harina, agua, grasa para panadería (conocida como hojaldrina), cabe recalcar que su proceso es largo, ya que se debe estirar y doblar la masa en reiteradas ocasiones para así formar los dobleces formando capas de hojaldrina y masa. Para que al momento de hornear reviente y se vean marcadas las capas y dar esa textura crocante que los caracteriza.
Sin importar la edad, sexo, clase social, los pasteles siempre serán muy consumidos por los guayaquileños y comerlos es una costumbre gastronómica nuestra.