Mayor capital desde el exterior llegó hasta septiembre del 2020
Los inversionistas internacionales inyectaron dinero en las actividades mineras, construcción y servicios, según el Central
La inversión extranjera directa (IED) que recibió el país hasta el tercer trimestre del 2020 alcanzó los USD 897,2 millones.
La cifra, según datos del Banco Central del Ecuador (BCE), es 45% mayor a la alcanzada en el mismo periodo del 2019.
El rubro que impulsó este crecimiento fue la minería, que atrajo USD 374 millones; esto es, el 41% del monto total.
Para Patricio Almeida, expresidente del Colegio de Economistas de Pichincha, ese dato se explica en los resultados de los proyectos a gran escala.
Otras áreas donde se invirtió fueron construcción, servicios y manufactura. A estos sectores llegó capital desde España, Estados Unidos e Inglaterra.
Entre los proyectos que se ejecutaron figuran la Aerovía en Guayaquil y obras en el Puerto de Posorja por parte de la compañía dubaití DP World.
Un instrumento que permitió atraer a inversiones fue la Ley de Fomento Productivo.
La norma, vigente desde 2018, tiene incentivos como la exoneración del impuesto a la renta para nuevos proyectos.
Entre enero y septiembre del 2020, el Comité Estratégico de Promoción y Atracción de Inversiones (Cepai) del Ministerio de Producción aprobó la suscripción de 32 contratos.
De esa cifra, 10 fueron con capital extranjero. Entre los sectores beneficiarios están el acuícola, agrícola, transporte, turismo y manufacturero, este último captó cuatro contratos en ese período.
Para Pablo Zambrano, titular de la Cámara de Industrias y Producción, un factor que frena la llegada de un mayor monto en inversiones es la falta de garantías en seguridad jurídica, de respeto a los contratos y de honrar laudos arbitrales.
“Un aspecto clave para que los inversionistas crean en el país, es contar con Tratados Bilaterales del Inversión (TBI) que brinden la oportunidad de mediación y litigación en el caso de que el Estado ecuatoriano cambie las reglas de juego”.
El proceso para que Ecuador firme nuevos TBI, que fueron dados de baja en el Gobierno anterior, está paralizado por un dictamen de la anterior Corte Constitucional.
Alvaro Galindo, socio de la firma Carmigniani & Pérez, dijo que “a pesar de los esfuerzos del actual Gobierno para contar con una interpretación de la actual Corte del artículo 422 de la Constitución, que le permita avanzar en la firma de acuerdos en materia de inversión con ofertas de arbitraje inversionista-estado con otras naciones, no existe, al momento, una respuesta de dicha Corte”.
Para solventar en parte el vacío generado por la falta de los TBI, el Gobierno se apalanca en Ley para el Fomento Productivo que le permite al Estado pactar arbitraje nacional o internacional en contratos de inversión que superen los USD 10 millones.
En agosto del 2020, se aprobó el primer contrato de inversión con arbitraje internacional. La firma Hendrix Genetic, en sociedad con Nutreco y Ecuacultivos, prevé invertir USD 23 millones para modernizar un laboratorio de cultivo de camarón, en Guayas.
El canciller, Luis Gallegos, explicó hace unos días que ha avanzado en negociaciones con los países con los cuales se denunciaron los tratados en el 2017 a fin de hallar “una solución para las controversias”.
Con Brasil, por ejemplo, se llegó a un acuerdo de facilitación de inversiones, dijo.