La minería a gran escala perdió en la consulta popular
La prohibición a las actividades mineras a gran escala ganó en la Consulta Popular, que se realizó el domingo pasado en el cantón Cuenca. De acuerdo con los datos preliminares de La Junta Provincial Electoral de Azuay, el sí logró el 80% de los votos válidos.
Fueron cinco preguntas. La primera fue: ¿Está Usted de acuerdo con la prohibición de la explotación minera metálica, a mediana y gran escala, en la zona de recarga hídrica del río Tarqui?, según la delimitación realizada por la Empresa Municipal Etapa? Sí o No.
Las cuatro preguntas restantes tuvieron el mismo texto y solo cambió las zonas recargas por los ríos Yanuncay, Tomebamba, Machángara y Norcay. Esta consulta popular fue impulsada por el Concejo Cantonal de Cuenca y aprobada por la Corte Constitucional, en septiembre.
El presidente de la Cámara de Minería de Azuay, Patricio Vargas, admitió la derrota. Agregó que ahora espera que se cumpla con lo estipulado con la Corte Constitucional para la realización de la consulta popular.
Entre otras condiciones, dijo, son que no tiene efecto retroactivo, por lo que no afectaría al proyecto Loma Larga. Además, que el Ministerio del Ambiente certifique la delimitación de las zonas de recarga hídrica.
Vargas exigió que el Municipio actúe en el estricto ámbito de sus competencias. “No puede arrogarse funciones, que no las tiene. No puede decidir la paralización de actividades mineras, que ya estaban operativas en el cantón”.
Según el representante gremial, solo estarían prohibidas las nuevas inversiones en minería y “se crean condiciones para la ilegalidad”.
Al respecto, el alcalde de Cuenca, Pedro Palacios, señaló que sus asesores jurídicos ratificaron que no se trata de una reversión de concesiones y “de hecho hay sitios de las concesiones que estarían por fuera de las zonas de recarga hídrica, por lo tanto, si allí existen yacimientos podrían explotarlos”.
Sin embargo, Palacios insistió que las preguntas de la consulta son claras porque señalan la prohibición de la explotación y, en la actualidad, ningún proyecto está en esa fase, sino en exploración.
Según él, Loma Larga, por ejemplo, al no estar en explotación no podría pasar a esa fase en las zonas delimitadas por la consulta. En todo caso, agregó que en el caso de existir dudas se consultaría a la Corte Constitucional.
Según Palacios, una vez que sean oficializados los datos, el Ministerio del Ambiente debe validar la georreferenciación de estas cinco zonas de recarga hídrica, que delimitó la Empresa Municipal Etapa.
Posteriormente, el Concejo Cantonal debe incorporarlas al Plan de Ordenamiento Territorial. Es decir, ratificar las zonas donde no se podría realizar las actividades mineras.
Él tiene previsto que el primer debate de ese plan se realice en abril o mayo y el segundo sería en junio o julio.
De acuerdo con el catastro minero, en el cantón Cuenca existen 73 concesiones, de las cuales 43 son de minería metálica. Esta jurisdicción cuenta con 95 000 hectáreas de áreas de recarga hídrica. Además, se identificaron 4 200 cuerpos de agua y de allí nacen los ríos Yanuncay, Tarqui, Tomebamba y Machángara.