El ente sostiene que el equipo no quiso inscribir a otros jugadores para actuar ante Barcelona. El club lo contradice.
Acostado en el sofá de su casa, sin camiseta y con aretes largos, el defensa de Aucas Richard Mina hizo una transmisión en vivo en Instagram, ayer al mediodía.
El jugador de 21 años conversaba en la transmisión con su amigo Juan Briones, también jugador del elenco oriental. “Cuando empezó el partido vi que todos los futbolistas de
Barcelona se pusieron ahí en fila para atacar. Creo que solo se quedó Riveros (Williams) y alguien atrás. Ahí les dije a los muchachos: tenemos que defendernos como sea y aguantar lo que más podamos”.
Mina, campeón sudamericano con la Selección Sub 20, se refería al partido del lunes, cuando Aucas presentó únicamente siete futbolistas para medirse con Barcelona.
Los orientales tienen a 19 jugadores contagiados con covid-19 y a otros dos auxiliares contagiados. El partido de la polémica apenas duró 17 minutos e iba 2-0, antes de que el golero oriental Johan Lara acusase supuestos signos de dolor para no continuar con el juego, que terminó con un marcador de 3-0 (por reglamento).
“Ojalá cuando sean otros equipos grandes los que tengan que presentarse en cancha con siete jugadores se actúe así. Creo que debía suspenderse el partido”, se lamentaba en su transmisión en vivo el zaguero Mina.
El desenlace del partido, según el director de Competencias de Ligapro, David Constante, sí afectó la imagen internacional del Campeonato. Pero, según el dirigente, fue un hecho que pudo haber sido evitado por el elenco oriental.
Aucas y el órgano rector del torneo local se hallan inmersos en una controversia por los hechos que desembocaron en el bochornoso partido.
Según Constante, ante la imposibilidad de contar con los futbolistas contagiados, Aucas pudo haber llevado más deportistas, ya sea de su equipo de reservas o formativas, pero se habrían negado a realizar la inscripción .
“Nosotros tuvimos la apertura con Aucas para que puedan inscribir jugadores. El Departamento de Control financiero iba a agilitar las cosas pero el club decidió no hacer la gestión”, dijo ayer el funcionario, en una entrevista para radio Caravana, de Guayaquil.
El club maneja otra versión. Según el gerente Andrés Báez, él mantuvo diálogos con Miguel Ángel Loor y con el vicepresidente de Barcelona, Aquiles Álvarez para reprogramar el partido apelando a una situación de fuerza mayor.
“Los juveniles que se entrenan con el equipo de Primera también tienen síntomas y no están inscritos para este torneo por el control financiero”, aseguró el dirigente quiteño.
Aucas jugará el sábado contra Olmedo, en el estadio Gonzalo Pozo Ripalda. Para poder completar la plantilla deberá usar a los juveniles de Reserva que se entrenan con el club, pero que no han tenido actividad en esta temporada ni en la anterior, pues los torneos formativos no se han desarrollado por la pandemia.
La próxima semana, el elenco capitalino afrontará el inicio de la fase de grupos de la Copa Sudamericana. El partido está previsto para el martes a las 19:30 en el Gonzalo Pozo. El club espera recuperar a alguno de sus contagiados.