Farinango acopla sus prácticas para ir a tokio
El nadador participará en la prueba de 10 km de aguas abiertas. Serán sus primeros Juegos.
Para llegar en óptimas condiciones a los Juegos Olímpicos de Tokio, el nadador David Farinango se está enfrentando a muchas cosas nuevas, como volúmenes de entrenamiento a los que no había llegado y acostarse en las mañanas para adaptarse al cambio de horario.
Hasta el domingo tiene planificado realizar los entrenamientos de mayor intensidad y volumen, para luego empezar a bajar las cargas de manera progresiva. Nunca antes había nadado como en estos días, contó vía telefónica. “Las cargas son bastante intensas”, confiesa el deportista, que nada unos 100 km a la semana. El domingo, precisamente, iniciará su adaptación definitiva al cambio de horario.
Junto con la también clasificada en los 10 km de aguas abiertas, la amazónica Samantha Arévalo, el nadador realizará su rutina al revés.
Es decir, empezará a dormir a las 09:00 para despertarse a las 16:00. Desayunará a las 16:30 y su primera práctica empezará a las 17:30. Su almuerzo será poco después de la medianoche y la cena, a eso de las 08:00, poco antes de irse a descansar.
El entrenador, Juan Fernando Enderica, confirmó que una adaptación similar ya se realizó en el 2019 con los seleccionados que acudieron al mundial en Corea del Sur. Les fue muy bien.
La intensidad de las prácticas y ese cambio radical en la rutina tienen emocionado al deportista, quien asistirá a sus primeros Juegos Olímpicos.
“Son cambios que, psicológicamente, me están ayudando y quiero ver hasta qué punto puedo mejorar, para aguantar el ritmo de la prueba que será muy fuerte”, asegura.
Farinango afirma que en los planes estaba llegar a los Juegos de París 2024, pero su progresión fue tan alta en esta temporada que alcanzó el cupo el pasado 20 de junio, en el preolímpico que se realizó en Sétubal, Portugal, al conseguir el noveno puesto.
“Lo logré de buena forma y entrenando. Espero seguir manteniéndome en un alto nivel, porque lo más difícil es mantenerse. Son casi 12 años de trabajo para una sola competencia”, afirma.
Los cambios han sido una constante en su trayectoria deportiva. De niño, sus padres lo inscribieron en un curso vacacional para que mejore su capacidad pulmonar, después de ser diagnosticado con asma.
Desde el inicio empezó a destacarse en el agua. Ganaba pruebas en piscina y en la adolescencia también empezó con las aguas abiertas. En el 2015 logró bronce en el Sudamericano juvenil de Lima.
Al rememorar sus logros, el deportista resalta el apoyo de su familia, que lo ha acompañado desde sus inicios. En la adolescencia, para mejorar, se fue a Estados Unidos, pero solo se entrenó seis meses en ese país. Retornó y decidió trasladarse a Cuenca, donde vive con un tío.
Allí coincidió en las prácticas con el experimentado Esteban Enderica, campeón de los Juegos Panamericanos del 2019, contra quien compitió por el cupo olímpico.
En Tokio, el tricolor será parte del selecto grupo de 25 nadadores que buscarán las medallas olímpicas en la exigente maratón acuática de 10 km. Su carrera está programada para el 5 de agosto, a las 06:30 de Japón (16:30 de Ecuador).
Farinango y Arévalo se preparan en estos días en la piscina olímpica de Cuenca. Combinan el agua con tres sesiones semanales en el gimnasio. Tienen previsto realizar un breve concentrado en el sector del Cajas y el 25 viajarán a Quito para realizarse pruebas PCR, que exige la organización de los Juegos. Olímpicos. Viajarán con rumbo a Japón el miércoles 28 de julio.