El equipo de Roberto Mancini paseó el trofeo por las calles de Roma. Hubo un permiso especial para la celebración.
La selección de Italia, flamante campeona de Europa, tras imponerse a Inglaterra este domingo en la final de la Eurocopa, en Wembley, celebró ayer su triunfo al recorrer el centro de Roma a bordo de un autobús descubierto ante miles de aficionados que se echaron a la calle para expresar su gratitud.
Tras ser recibida por el presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, y por el primer ministro, Mario Draghi, el combinado subió a un autobús descubierto en Palazzo Chigi y recorrió las calles romanas hacia el hotel Parco del Principi, donde los jugadores durmieron ayer antes de dejar la concentración.
La delegación de la selección italiana fue recibida por Draghi, junto al tenista Matteo Berrettini, finalista este domingo en Wimbledon, donde perdió ante el serbio Novak Djokovic, y por los atletas del equipo italiano sub-23, que brillaron en los europeos de su categoría, quienes fueron homenajeados y premiados por honrar el deporte italiano y promoverlo por el mundo.
“Gracias, porque sus resultados fueron extraordinarios. Italia ganó la Eurocopa tras más de 50 años. Berrettini fue el primer italiano en jugar la final de Wimbledon en casi siglo y medio. El equipo sub-23 de atletismo fue líder del medallero de los Europeos, por primera vez en trece ediciones. Nos hicisteis emocionar, conmover, alegrar, abrazar”, afirmó Draghi en su discurso.
“Cada generación tiene sus recuerdos: la Copa Davis de 1976, el grito de Marco Tardelli en la final del Mundial de 1982, el récord del mundo de Pietro Mennea en los 200 metros, Francesca Schiavone y Flavia Pennetta en Roland Garros y Nueva York, el Mundial de 2006; hoy ustedes entran en la historia, con sus ‘esprints’, goles, paradas, y ¡qué paradas!”, agregó el primer ministro, al referirse a las decisivas intervenciones del meta Gianluigi Donnarumma -el mejor jugador de la Copa- en la tanda de penaltis contra Inglaterra.
La selección ‘azzurra’ consiguió el visto bueno de las autoridades competentes, tras varias horas de negociaciones, para poder celebrar el título junto a sus aficionados, algo que creaba preocupaciones a causa de la pandemia del coronavirus y la gran cantidad de personas que se reuniría para celebrar, muchas de ellas sin mascarillas.
Los más activos en el grupo de futbolistas fueron el capitán Giorgio Chiellini, quien enseñó la copa a sus aficionados, y Leonardo Bonucci, uno de los grandes protagonistas del triunfo ante Inglaterra, al anotar el gol del 1-1 y el penalti en la tanda final.
Italia, entrenada por Roberto Mancini, conquistó este domingo la segunda Eurocopa de su historia, tras la de 1968. Este trofeo se suma a los cuatro Mundiales conquistados en 1934, 1938, 1982 y 2006.
La final de la Eurocopa de fútbol, en la que la selección italiana se proclamó campeona ante Inglaterra, en Londres, fue seguida por 20,604 millones de espectadores en Italia; un tercio de la población del país, lo que convirtió este partido en el vigésimo séptimo evento más seguido de la historia de la televisión italiana.
Los dos canales con los derechos televisivos del campeonato, la RAI y Sky Sport, obtuvieron una cuota de pantalla conjunta del 83,58 %, lo que supuso 18,172 millones de espectadores en la RAI y 2,432 millones en Sky Sport, informó este lunes la Federación de Fútbol Italiana (FIGC).
La final fue el vigésimo séptimo evento más visto en la historia de la televisión en Italia, en una clasificación en la que los 50 eventos más seguidos son partidos de fútbol, 47 de los cuales de la selección italiana. El partido más visto es el Italia-argentina del Mundial italiano de 1990, cuando se registró un total de 27,537 millones de espectadores con una cuota de pantalla de un 87,25 %.