UN TOQUE DULCE Y SALUDABLE
LOS POSTRES SON UN APERITIVO QUE APORTA ENERGÍA A LOS NIÑOS Y ADULTOS; SU CONSUMO DEBE SER CON MODERACIÓN.
Los postres son los alimentos favoritos de los niños, aunque en muchos padres hay recelo a la hora de servirlos.
Y es que el abuso de estos platillos puede ser malo dentro de la dieta infantil, aunque también es negativo privar al infante de ellos.
Yuliana Mendoza, nutricionista, detalla que a través de un postre se puede aportar de “una forma fácil, rica y sobre todo saludable, los nutrientes que necesita el niño”. Lo importante es que sea sano y nutritivo.
DULCES. La profesional explica que “jamás estaremos exentos de que los niños consuman dulces o snacks azucarados en algún punto de su vida. Lo más sano es saber como padres en dónde y cuándo incluirlos a la dieta infantil. Lo primero es educar a nuestros niños desde muy pequeños sobre los alimentos saludables y no saludables, darles a conocer lo que les hace bien y lo que no. Desde ese punto arrancamos y sabremos educar nutricionalmente”, sostiene Mendoza.
Agrega que una buena manera de evitar las golosinas procesadas es con la elaboración de postres caseros a base de frutas.
DESDE BEBÉS. A partir de los 6 meses de edad comienza la ablactación de los niños, que básicamente es el proceso de introducir los primeros alimentos a sus dietas. Desde esa etapa podemos ofrecerles postres saludables.
“Aquí podemos hacer pequeños helados a base de leche materna, así mismo podemos introducir helados a base de frutas”, explica la profesional, quien añade que a partir del año de vida se puede sustituir la leche por el yogur y añadir frutas congeladas.
RECOMENDACIONES. Tanya Vélez, pediatra, señala que los postres saludables son ideales para consumirlos como snacks a la media mañana o la media tarde. “Aportan de energía suficiente a los pequeños de la casa. Se los pueden consumir al finalizar el almuerzo, siempre y cuando no reemplacen a la comida principal”, dice. La especialista sostiene que la clave para que sea saludable este bocadillo es que contenga fruta, lácteo, avena o granola y que sean productos naturales.
RECETAS. Mendoza indica que dentro de los postres que se pueden elaborar desde casa están las brochetas de banano cubiertas de cacao. “Congelamos por un par de horas el plátano rebanado e insertado en las brochetas. Después se puede añadir el chocolate fundido”, narra. Para fundir el chocolate se usa la técnica de baño María. Se coloca en el recipiente la porción de chocolate y una cucharada de aceite o mantequilla. Hay que mover la mezcla hasta que el chocolate se derrita por completo. Otra receta puede ser poner en un recipiente pequeños trozos de esta fruta y añadir un poco de miel de limón.
LOS POSTRES SON UNA FORMA FÁCIL, RICA Y SOBRE TODO SALUDABLE DE APORTAR NUTRIENTES A LA DIETA DE UN NIÑO”.
YULIANA MENDOZA NUTRICIONISTA