EVANGELIO DOMINICAL
10 DE OCTUBRE
DOMINGO XXVIII DEL TIEMPO ORDINARIO
Mc 10, 17-30
En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó corriendo un hombre, se arrodilló ante él y le preguntó: “Maestro bueno, ¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna?”. Jesús le contestó: “¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino solo Dios. Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, no cometerás fraudes, honrarás a tu padre y a tu madre”.
Hoy vemos cómo Jesús, que nos ama, quiere que todos entremos en el Reino de los cielos. De ahí esta advertencia tan severa a los “ricos”. También ellos están llamados a entrar en él. Pero sí que tienen una situación más difícil para abrirse a Dios. Las riquezas les pueden hacer creer que lo tienen todo; tienen la tentación de poner la propia seguridad y confianza en sus posibilidades y riquezas, sin darse cuenta de que la confianza y la seguridad hay que ponerlas en Dios. Pero no solamente de palabra: qué fácil es decir “Sagrado Corazón de Jesús, en ti confío”, pero qué difícil se hace decirlo con la vida. Pero tanto los ricos como los pobres, nadie se puede salvar por sí mismo: “¿Quién se podrá salvar?”, exclamarán los discípulos. “Para los hombres, imposible; pero no para Dios, porque todo es posible para Dios”, responderá Jesús.
MONS. VICENTE SAETEROS OBISPO AUXILIAR DE PORTOVIEJO NOTICIAS DE LA IGLESIA
Este lunes 11 de octubre, los sacerdotes con entre 5 y 10 años de ordenados, tendrán un encuentro formativo y de vida fraterna, acompañados por el Vicario del Clero y el Arzobispo.
Del sábado 16 al domingo 24, la Iglesia manabita vivirá una “jornada misionera” por sectores, visitando a las familias con ocasión del Mes de las Misiones y del Santo Rosario. Compartirán además gente de menores recursos, bajo el lema “Misioneros como María, evangelizando con alegría”.
2021-2022: Año de la Contemplación Lema de octubre: “Misioneros con María, evangelizando con alegría”