El Diario (Ecuador)

QUEDAR FUERA

AUSTRALIA Y DINAMARCA SE JUEGAN LA VIDA PARA CLASIFICAR A LA SIGUIENTE FASE DEL MUNDIAL DE CATAR.

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Australia y Dinamarca disputan hoy un duelo decisivo en su objetivo de llegar a los octavos de final del Mundial.

El partido se jugará a las 10h00 (hora ecuatorian­a) en el estadio Al Janoub. Una victoria es vital para ambas seleccione­s, aunque los ‘socceroos’ llegan en mejor posición y hasta con cierta holgura. Esto luego de vencer por 1-0 a Túnez en la jornada anterior y posicionar­se en el segundo lugar del grupo D, con tres unidades.

Esta será la segunda vez que se enfrenten en una cita mundialist­a. En el 2018 integraron el grupo C y empataron 1-1. Sin embargo, fueron los daneses quienes avanzaron hasta la siguiente ronda.

Es por ello que el entrenador de Australia, Graham

Arnold, aseguró que si alcanza los octavos de final de Catar conseguirá “dejar huella” en un país en el que tienen más importanci­a otros cuatro deportes por delante del fútbol. Cabe señalar que los ‘socceroos’ llegaron, por primera vez a octavos de final de una Copa del Mundo en Alemania 2006.

“El fútbol es solo el cuarto o el quinto deporte en Australia. Dejar huella sería algo inmenso. El Mundial de 2006 fue una inspiració­n para los jugadores que están aquí hoy. Queremos seguir poniendo el fútbol en el mapa de Australia y aún queda mucho trabajo por hacer. En 2006 conseguimo­s cuatro puntos en la fase de grupos. Seis, sería un récord para el país”,

dijo Arnold.

Dentro de las novedades, el DT informó que podrá contar con Nathaniel Atkinson, quien fue descartado en el anterior partido por un golpe.

EL RIVAL. Dinamarca saldrá al campo con la obligación de sumar de a tres, ya que se ubica en el tercer puesto de la zona con apenas una unidad, misma cantidad que Túnez, por lo que también observará su resultado final contra Francia. El conjunto de Kasper Hjulmand, que llegaba como una de las candidatas a ser la revelación del mundial, no ha tenido el rendimient­o esperado.

Tan solo en algún tramo del partido ante Francia expuso parte de sus cualidades, pero cayó 2-1 en el estadio 974.

Ni Christian Eriksen ni el resto de la ‘dinamita roja’ ha explotado aún. Dinamarca lleva cinco partidos mundialist­as sin ganar. No lo hace desde que se impuso a Perú en Rusia 2018. Ahora es el momento de la verdad, en el que debe aparecer su fútbol auténtico.

El entrenador de los daneses indicó que sus jugadores están “acostumbra­dos” a las situacione­s de presión. “Los jugadores están acostumbra­dos a estas situacione­s. Saben cómo preparar los partidos importante­s, ya sea con la selección nacional o con sus clubes. Nos entrenamos y nos preparamos como siempre, con el deseo de que cada uno haga bien su papel”, dijo.

Luego agregó: “El Mundial es una gran emoción porque la selección nacional es lo máximo. Te das cuenta de lo importante que es para los jugadores, para la gente de todo el mundo. Eso es lo bonito del fútbol. Así que hay que disfrutar de estos momentos”.

Para Hjulmand, el combinado australian­o es un equipo “muy colectivo y muy solido” que dependen mucho de estar unidos.

En eso, señaló, se “parecen mucho” a Dinamarca porque “atacan y defienden juntos”.

Hjulmand podría recuperar para la zaga a Simon Kjaer, que no formó parte del once ante Francia por problemas físicos.

Mientras que para el ataque deberá decantarse entre el actual delantero del Villarreal, Kasper Dolberg, y Andreas Cornelius, que se han repartido las dos titularida­des en esta cita mundialist­a. Otra opción sería el ingreso de Andreas Skov Olsen, de Brujas de Bélgica.

10h00

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