American School, campeón inédito
PABLO ARÉVALO, exgloria del Deportivo Cuenca, fue el técnico que ayudó al equipo a impregnar su nombre en el trofeo de las Jornadas de Integración y Deporte de las Escuelas y Colegios Particulares 2023-2024
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La tercera fue la vencida”, exclamó emocionado el profesor Pablo Arévalo en la cancha de césped de la Unidad Educativa Santana. En su tercer año al frente del equipo de fútbol femenino de la U.E. American School celebró junto a sus dirigidas el título en la categoría superior. En una final apretada, sobre todo en el primer tiempo, venció por 3-0 al Latinoamericano.
La primera conquista llegó en el minuto 11 de la etapa inicial. Karla Reyna se decidió a rematar desde fuera del área, levantó el balón por arriba de la guardameta y cuando parecía que iba a rebotar en el travesaño, infló las redes. Su entrenador se fundió en un fuerte abrazo con el ‘Chino’ Quinde, su asistente.
En el segundo tiempo, Latino adelantó líneas y trabajó el empate. Una mano en el área que pasó desapercibida ante los ojos del árbitro, alteró el ánimo de unos padres de familia que se dieron modo de ver el partido desde el exterior del escenario deportivo. Por medidas de seguridad interna, los cotejos se jugaron sin público.
Al promediar el minuto 5, en una contra, Ángela Li se acomodaba para fusilar a la arquera. Al ver que nadie le marcaba, Rafaela Espinoza llegó desde atrás para intentar enviar el balón al córner. Por mala fortuna le salió un remate en arco propio y American celebraba la segunda conquista.
Latino perdió el orden y la concentración. Incluso, por excederse en los reclamos, el entrenador salió expulsado. ´Más allá de las decisiones arbitrales, sus dirigidas empezaron a llenarse de faltas. En una de ellas, cerca del área, Joaquina Villavicencio se llevó por delante a Evelin Cajamarca. La ‘10’ no tardó en levantarse y de tiro libre firmó el tercer tanto y sentenció el primer título estudiantil de su equipo.
Arévalo destacó la “dedicación” de las futbolistas, así como el apoyo de las autoridades y profesores para que las estudiantes puedan entrenar. Con su dilatada experiencia en el balompié profesional espera contribuir con un ‘granito de arena’ al desarrollo del fútbol femenino.
“Hay mucho potencial. Realmente en Cuenca el fútbol femenino ha crecido bastante. Individual y colectivamente hay mucho talento”, dijo en un diálogo con El Mercurio antes de abordar la buseta donde el equipo retornó a su sede entonando ¡Dale campeón, dale campeón! (BST)-(D)