Mafias extranjeras en la Bahía amenazan a comerciantes locales
Un video en el que se ve cómo dos personas, identificadas como venezolanas, atacan a un comerciante local mientras intentan cobrar una deuda adquirida a un chulquero (prestamista) colombiano se viralizó días atrás en redes sociales.
Esto puso en evidencia una nueva dinámica que se ha desarrollado en la Bahía de Guayaquil en los últimos años, en la cual los extranjeros cumplen un papel importante.
Por ejemplo, varios comerciantes obtienen préstamos a
Los comerciantes piden más policías y que se controle a los extranjeros.
altos intereses de parte de usureros supuestamente colombianos y son grupos de venezolanos quienes cobran los pagos, en ocasiones lo hacen de forma violenta, a veces les pegan a los comerciantes y hasta se les llevan sus pertenencias o mercadería. Lo dicen los comerciantes en voz baja y lo saben algunas autoridades.
Esto ya ha sido detectado por la mayoría de los más de cien agentes metropolitanos que están en el sector. Según
Jaime Dávalos, el jefe del Cuerpo de Agentes Metropolitanos del Municipio, también los uniformados de azul han sido hasta agredidos y amenazados por los extranjeros.
“Dijeron al agente, no te metas que así se resuelven los asuntos en Venezuela”, cuenta el jefe de los Metropolitanos, quien señala que los otros comerciantes reclamaron a los extranjeros. Dávalos explica, por ejemplo, que el comerciante que estaba siendo ahorcado, por no pagar la cuota, no se dejaba quitar su celular y que se habría zafado cuando intervinieron un metropolitano y otros vendedores. Eso quedó captado en un video.
El funcionario señala que luego de eso el hombre, que era amenazado, habría dado un golpe con la cabeza al extranjero que lo ahorcaba y le rompió la frente.
Tras eso se dio otra serie de amenazas contra el metropolitano, pues los extranjeros llamaron a sus compatriotas, y el agente municipal incluso puso una denuncia en la Fiscalía porque teme por su vida y fue cambiado a otra zona para precautelar su integridad.
Los comerciantes admiten que todos tienen derecho a trabajar, pero aseguran que los extranjeros son personas violentas y extorsionadores.
“Si no quieres pagar hasta te van hincando con un cuchillo”, dijo Mariana, una vendedora informal que ha sido desplazada por los extranjeros bajo amenazas por el sector de la Caja del Seguro.
Jaime Dávalos da un ejemplo puntual. Señala que los cigarrillos que actualmente se han popularizado en la Bahía estarían siendo importados con los préstamos de los usureros.
El funcionario calcula que de 10 cajas de cigarrillos que se
En la Bahía controlan 160 policías metropolitanos pero no son suficientes.
venden en la Bahía, 9 son marcas sin registro, de contrabando. Luego estos productos son vendidos por venezolanos.
El funcionario refiere que los préstamos de los chulqueros están incrementando el contrabando de varios artículos.
La Bahía esta conformada por al menos 42 manzanas y muchos callejones. Actualmente hay 160 metropolitanos pero parece que no es suficiente para controlar la zona, por eso en dos semanas se incorporan 50 metropolitanos más a las filas. Dávalos detalló que son 34 hombres y 16 mujeres que han sido capacitados las últimas semanas.
Lo mataron por $ 50
La violencia en el cobro de deudas por parte de los extranjeros se evidencia también en otras provincias. Por ejemplo, Darío Javier Anchundia Minaya, de 25 años, fue asesinado de un balazo dentro de su propia casa el pasado Viernes Santo, en el sector Cristo Negro del cantón Tosagua, norte de la provincia de Manabí.
En el ataque también resultó herido de bala el hijo de la víctima, mientras que la esposa terminó golpeada. Según la versión de testigos, dos hombres extranjeros que entregan artículos a crédito estarían detrás del hecho violento. Relataron a la Policía que la mujer de Darío no habría podido pagar una imagen religiosa que se la habían entregado por $ 50.
Cecilio Cedeño, suegro del fallecido, dijo a la policía que los sujetos llegaron a bordo de una motocicleta a la casa de la familia, con la intención de acabar con la vida de ella, pero su esposo se interpuso y fue herido de gravedad. (I)