Manabita fue a su séptimo mundial de fútbol gracias a concurso que ganó en 1998
María de Jesús Pinargote Zambrano puede ir a todos los certámenes y con un acompañante.
En la sala de su casa están los adornos y recuerdos de los mundiales de fútbol a que ha asistido. María de Jesús Pinargote Zambrano, de 65 años, espera volver a Ecuador con otros recuerdos, ahora desde Qatar.
Oriunda de la parroquia Canuto, del cantón Chone, Jesús viajó para su séptimo Mundial consecutivo.
Ella se ganó un premio que otorgó una empresa de gaseosas en 1998 y que consiste en viajar a todos los mundiales de por vida, incluido un acompañante con todos los gastos pagados.
Recuerda que en junio de 1998, días antes de que se iniciara el Mundial de Francia, la llamaron por teléfono para indicarle que había salido favorecida con el sorteo y que se acercara a las oficinas en la ciudad de Portoviejo llevando toda la documentación para viajar a Francia.
“Arreglé pasaporte y todo en una semana, siempre acompañados por abogados de la empresa, ellos hacían todo el trámite, no lo podía creer, por tres ocasiones me llamaron hasta que fui; mi esposo y familiares estaban muy alegres”, dice.
El primer Mundial al que asistió fue precisamente hace 24 años, en Francia 1998. Lo hizo en compañía de su esposo, Rodolfo Pinargote Chica, quien falleció en el 2019. En Corea y Japón 2002, estuvo con su hermana política, Mercedes Pinargote Chica.
En el Mundial de Alemania 2006, María de Jesús viajó con su prima Emma Pinargote Marcillo. Ya en Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, estuvo de vuelta con su esposo. Y a Rusia fue con una prima.
María de Jesús tenía un negocio de víveres y eso le permitió participar en el concurso denominado “Destapa la pasión y viaja gratis de por vida a los mundiales”.
En esta ocasión viajó nuevamente con su prima Emma, quien también se mostró contenta en poder acudir a su segundo Mundial.
Tener la oportunidad de viajar y conocer muchos países ha sido una bendición de Dios. No sabe hasta cuándo podrá tener esa fortaleza para seguir asistiendo a los mundiales, pero espera y confía en poder completar diez citas mundialistas.
María de Jesús ha tratado de aprender de la cultura de los países a los que ha asistido. En cada viaje procura comprar detalles o artesanías de los lugares visitados, y fotografiarse para tener recuerdo de cada Mundial. (I)
EL PRIMER MUNDIAL AL QUE ASISTIÓ FUE EL DE FRANCIA 1998.