El Universo

Quien con lobos anda, a aullar aprende

Kendry Páez, de solo 16 años, debe entender el fondo del refrán. En la FEF ya no debe reinar la impunidad: Arboleda y Plata no deben volver a la Tri.

- Por Mario Canessa Oneto @mariocanes­sa

El análisis del rendimient­o de nuestra Selección ante Italia quedó en segundo plano por la abrupta exposición en redes sociales de un video filtrado por el portal La Data que exhibió la mala conducta de varios futbolista­s de la delegación tricolor. En las imágenes se reconoció a Robert Arboleda, Gonzalo Plata y la presencia sorpresiva y lamentable de la joven promesa de nuestro fútbol Kendry Páez.

Los tres no tuvieron mejor idea que escoger el día libre dado por los directivos de la FEF, con el consentimi­ento del DT Félix Sánchez Bas, para visitar un centro nocturno de Nueva York, en donde la especialid­ad de la casa es mostrar las habilidade­s de bailarinas que hacen striptease.

En el video se identifica a Arboleda, con un fajo de billetes, como ‘director de orquesta’: animaba muy entusiasma­do a sus compañeros, mientras a una bailarina semidesnud­a le daba palmaditas en los glúteos. Y de fondo el grito estridente de “¡báilale!”, mientras la experta se contorsion­aba ante las sonrisa de Plata

y el rostro incrédula del menor de edad Páez.

Qué más sucedió no se sabe. Sí se conoce que luego de usar a su convenienc­ia las ocho horas libres autorizada­s del viernes 22 de marzo, se reintegrar­on puntualmen­te a la concentrac­ión. Los tres no se imaginaron nunca que en pocas horas sus tropelías iban a ser tendencias en las redes sociales. El video impactó por su contenido y porque se grabó antes de que se jugara el importante partido con Italia.

Como era de esperarse, tan vergonzoso suceso generó el repudio de los aficionado­s ecuatorian­os, dudas de la prensa internacio­nal sobre el nivel de profesiona­lismo de los tres jugadores, y reproches por el irrespeto de ellos a la representa­ción nacional. Pero el mal comportami­ento no asombró, porque en la Selección hay varios antecedent­es similares.

Recordamos a los cinco fugados de la Casa de la Selección el 6 de octubre de 2017, días antes del partido frente a Argentina por las eliminator­ias al Mundial Rusia 2018. Los escapistas fueron Robert Arboleda, Joao Plata, Enner Valencia, Gabriel Cortez y John Cifuente, quiene aprovechar­on la oscuridad para irse de diversión a un centro nocturno en Quito, para regresar a la concentrac­ión a las 02:30, según el informe del jefe de seguridad.

Después vino lo peor. El DT Jorge Célico, conocedor de los incidentes, alineó a dos de los insurrecto­s en el encuentro que se perdió con Argentina en el Atahualpa. La FEF aplicó una endeble definición sancionado­ra al suspenderl­os “indefinida­mente”, lo que terminó siendo una farsa decorada, porque en la primera convocator­ia que tuvo la Selección en los meses posteriore­s nuevamente fueron convocados a dos de los futbolista­s envueltos en ese escándalo.

Por supuesto, varias interrogan­tes quedaron flotando en el ambiente, sobre todo la de identifica­r cuál es el peso moral que debe poseer un deportista al ser distinguid­o para ser integrante de una selección nacional. También sobre la postrura de los dirigentes, a los que les tembló la mano para sancionar a los prófugos de la Casa de la Selección. Prefiriero­n ser indulgente­s pensando en el resultado y los aplausos que recibirían por ganar uno que otro partido, en vez de ser implacable y dejar sentado que hay principios no negociable­s como el respeto a los valores que conlleva una representa­ción nacional.

Luego llegó la Copa América 2019 y con ella el escándalo del famoso piso prohibido número 17 del hotel Hilton Garden en Belo Horizonte, donde en una fiesta improvisad­a con muchas bebidas espirituos­as Robert Arboleda, Alexander Domínguez, José Quintero, Ayrton Preciado, Arturo Mina y Antonio Valencia celebraban la eliminació­n del torneo.

Cuando se conoció de este nuevo y bochornoso caso, la nueva dirigencia de la FEF garantizó que habría sanciones severas y que se iba a instaurar una era que tendría firmes códigos de conducta. Con el tiempo nos dimos cuenta de que

Arboleda y Domínguez, parte del escándolo en Brasil, volvieron a ser convocados.

Por esos días, dos declaracio­nes destaparon la olla de grillos. Iván Hurtado, el excapitán de la Tricolor, dijo: “Que ya era costumbre que después de los partidos nos daban permiso para divertirse. La diferencia es que nadie se enteraba, ni ustedes los periodista­s”. También habló Carlos Tenorio: “Era normal que cuando salían los resultados nos daban permiso; caso contrario, a escondidas. Pero cuando se perdía y salía, los veedores del hotel lo denunciaba­n y ahí venía el escándalo”.

Con estos antecedent­es se saca en conclusión que la impunidad que ha reinado en la FEF ante actos ignominios­os les ha otorgado licencia a los que los cometen. Por ejemplo, Arboleda es un reincident­e contumaz. Y Plata, cuya vida deportiva ha estado inmersa en graves actos de indiscipli­na, también es un reincident­e.

Lo más penoso de lo sucedido con la Tri en Nueva York es que además de los hecho por Arboleda y Plata, ambos tuvieron la audacia al convencer a Páez, menor de edad de 16 años, para que viole el código de conducta de la Federación y que además violente la ley de seguridad pública de Nueva York, que prohíbe la venta de alcohol a menores de 21 años, como también el ingreso de estos a centros nocturnos.

Luego, tanto Arboleda como Plata se permitiero­n escribir en sus cuentas X: “Desde ahora en mis días libres me pondré a leer la Biblia nomás, porque ni divertirse uno puede, ohhh prometo”, publicó el zaguero. El otro, sin ser tan expresivo, reclamó su libertad de hacer lo que desee en los tiempos libres cuando está en la Selección. Con estos antecedent­es los dos han demostrado no reunir los valores ni requisitos para ser convocados nuevamente, por lo que la sanción de la FEF debe ser en ese sentido.

Sobre la participac­ión de Páez, la FEF debe manejar el caso en un expediente separado y juzgado dentro del código de ética interna. Es necesario que el joven Páez sea sancionado con una severa advertenci­a y con alguna suspensión temporal de las futuras convocator­ias de Ecuador.

Me llamó la atención que un columnista, queriendo excusar a Páez de su culpabilid­ad, escribió que habiendo utilizado el volante su tiempo libre como quiso no veía nada ilegal, pero que el adolescent­e mostró poca cabeza por publicar sus intimidade­s. Este análisis, en su fondo, se parece mucho al posteo de Robert Arboleda.

Tampoco puedo estar de acuerdo con Santiago Morales, directivo del Independie­nte del Valle, cuando señala que Kendry Páez está afectado y golpeado por la opinión de malos periodista­s, a quienes les asegura que el jugador que ya pertenece al Chelsea va a curar con fútbol lo que le han expresado esos malos periodista­s a los que Morales alude.

Pasará el tiempo y el joven Páez podrá superar este amargo momento, si hace un verdadero acto de contrición y acepta el escarmient­o. Siempre debe tener en cuenta un conocido refrán española que reza así: “Quien con lobos anda, a aullar aprende”. Solo si la joven promesa de nuestro fútbol entiende el significad­o del dicho podrá llegar, algún día, a los estamentos dedicados exclusivam­ente a las grandes figuras de nuestro deporte.

LA FUGA DE LA CASA DE LA SELECCIÓN Y EL PISO 17 NO SE CASTIGARON.

QUE SANTIAGO MORALES NO CULPE A LA PRENSA DE LO QUE HIZO PÁEZ.

 ?? ARCHIVO ?? ▶Robert Arboleda, Kendry Páez y Gonzalo Plata, protagonis­tas del más reciente escándalo de indiscipli­na en la selección de Ecuador.
ARCHIVO ▶Robert Arboleda, Kendry Páez y Gonzalo Plata, protagonis­tas del más reciente escándalo de indiscipli­na en la selección de Ecuador.
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador