HALLOWEEN
Cuando en 1978 John Carpenter creó la cinta Halloween, estaba lejos de sospechar que el filme se convertiría en película de culto, que llegaría a tener nueve secuelas. Ahora, en este 2018, David Gordon Green la toma, la transforma y borra con su dirección a todas sus predecesoras, exceptuando, claro está, al que se podría llamar ‘El comienzo’, pues la versión actual se refiere totalmente a lo que sucedió en la primera, las restantes no interesan.
A fin de confirmar la idea, contrató a Jaime Lee Curtis y le dio el rol de Laurie Strode, el mismo que tuvo la actriz cuando tenía 19 años y debutaba en el cine con el largometraje en referencia. Y es justamente ella la que da mayor impacto al filme. Su Laurie tiene ya 59 años, es madre y abuela. A la hija la ha perdido por su insistencia en criarla como si fuese a luchar en un campo de batalla; pero tenía razón… Myers ronda sus vidas y Laurie está preparada para defender a su familia. La Curtis trabaja con excelencia, mostrando obsesivamente sus anhelos de seguridad. En su actuación nada queda al azar debido al realismo que le otorga al personaje.
Green dirige con certeza y el libreto impide que el espectador vislumbre lo que vendrá, pues todo llega cuando menos se pensaba y esa es la fórmula perfecta del cine de terror, al que ahora llaman ‘de cuchilladas’. Para aliviar la tensión, ha creado momentos llenos de buen humor, sin llegar a la comedia, que sirven para las escenas en que interviene gente jo- Un equipo británico de filmación (Rhian Rees y Jefferson Hall) llega a los Estados Unidos para visitar a Michael Myers (Nick Castle y James Jude Courtney) que está preso. Quieren entrevistarlo para un programa que rueda sobre los crímenes, macabros por cierto, que cometió en Haddonfield. Los acompaña el doctor Sartain (Haluk Bilginer). Pero Myers escapa debido a que el bus que lo llevaba de una prisión a otra sufre un choque. El asesino en serie busca a Laurie Strode (Jaime Lee Curtis) para acabar de una vez por todas lo que empezó cuarenta años. Pero Laurie se ha armado y preparado para el día en que Michael Myers regrese y hará todo lo posible para salvar su vida, la de su hija Karen (Judy Greer) y la de su nieta Allyson (Andi Matichak). ven, pues los muestra tal como se es en esa etapa de la vida.
Y no es que falten los crímenes. Al contrario. Son en serie, solo que Green resolvió no mostrarlos del todo pero sí dejar
saber que se están cometiendo, que siguen los bosques sumidos en la oscuridad mostrando peligro, de gente que muere y el público se conduele de sus frágiles vidas.
También permite ver el trauma emocional de Laurie. Lo que podría fastidiar es su marcada violencia, el ritmo que le otorga. Por todo ello, Halloween, al igual que Nace una estrella, será vista con aplausos por la generación actual, aunque disguste su crudeza. Michael Myers, interpretado por dos actores, es más bien la sombra que representa -con autoridad- la fuerza implacable del mal.
La concepción gráfica del largometraje es perfecta: basta con ver a Myers encadenado a la pared de concreto.