“FUI ADICTA A LOS OPIÁCEOS POR UNA DÉCADA”
JAMIE LEE CURTIS
La vida artística de Jamie Lee Curtis ha estado llena de gratos momentos, pero su vida personal pasó por momentos difíciles en los años 90. “Yo estaba por delante de la epidemia de opiáceos”, admite Curtis en una entrevista con la revista People. ”Durante diez años estuve robando, engañando. Nadie sabía. Nadie”, confiesa la intérprete de Ponte en mi lugar. La actriz, quien lleva más de 40 años en la industria del cine, cuenta que le recetaron opiáceos por primera vez en 1989, después de una cirugía plástica menor. Inmediatamente, Curtis empezó a adquirir una adicción hacia la droga, lo que la llevó a incluso a robar analgésicos a sus familiares y amigos. Finalmente, en 1998, su hermana Kelly se enteró de su situación, lo que impulsó a la estrella a buscar ayuda. En ese entonces, la protagonista de Mentiras arriesgadas llevaba 15 años casada con el actor y director Christopher Guest, pero nunca le había revelado su secreta adicción por los opioides. Esto cambió en febrero de 1999, cuando la actriz acudió a su primera reunión de recuperación y le dijo toda la verdad a Guest. Actualmente, la pareja lleva 33 años juntos y comparten dos hijos: Annie, de 31 años; y Thomas, de 22. “Estoy rompiendo el ciclo que básicamente ha destruido la vida de generaciones en mi familia”, señala Curtis, refiriéndose al hecho de que su padre, Tony Curtis abusara del alcohol, la cocaína y la heroína durante años, y a que su hermanastro Nicholas muriera de una sobredosis de heroína en 1994. “Mantenerme sobria sigue siendo mi mayor logro hasta ahora... más grande que mi esposo, más grande que mis dos hijos y más grande que cualquier trabajo, éxito, fracaso. Cualquier cosa”, afirma la actriz.