RICKY MARTIN TODA UNA FIESTA
La ciudad de Cuenca celebró 198 años de independencia el pasado sábado y Ricky Martin parecía conocer a la perfección el motivo de esta fecha. El boricua fue la estrella internacional invitada por la Alcaldía y la empresa privada para poner a bailar a nativos y turistas de la capital azuaya. La aparición del cantante se dio a las 21:23, el cual vestido con un traje negro estilo militar parecía estar asistiendo a una reunión cívica.
Pero eso solo en apariencia, porque el estallido de alegría, las imponentes pantallas y la percusión a tope solo podían significar una cosa: venía preparado para la fiesta.
María fue la primera canción que tocó para los miles de asistentes al estadio Serrano Aguilar, que pese a que no estaba lleno en su totalidad y la única localidad completa era Golden Box, dejaron a Ricky satisfecho.
Este espectáculo se convirtió en un recorrido completo de sus temas más populares, por lo que fue fácil ver cantar a adultos y adolescentes. En 1991 lanzó su disco debut. Ahora es el hombre latino con más impacto en la industria musical mundial.
Pero el impacto de su carrera, su poder de convocatoria y magistral talento no son nada sin su generosidad.
En esta gira, denominada Ricky Martin Live, no solo se luce él, también sus músicos y bailarines. Es un show orquestado y ensayado minuciosamente. Y mejor aún, todos tienen instantes para brillar.
Sus fanáticos conocen de sobra este aspecto del también actor, y por eso quisieron venir a acompañarlo.
Asistió gente de Manta, Guayaquil y Quito. Además de extranjeros provenientes de Chile, Cuba, Colombia y Venezuela. Sus banderas se veían entre las cabezas de los presentes.
A los ecuatorianos les encanta el romance, las historias de amor tristes. Esta fue la parte más sentida del concierto. Llegando incluso a ponerle la piel de gallina a un ‘veterano’ como Martin. El apuesto intérprete, vestido de bata amarilla, la cual ofrecía mucha intimidad, cantó Vuelve.
Luego, con otro atuendo blanco interpretó Tu recuerdo, Fuego de noche, nieve de día y Te extraño, te olvido, te amo.
Pero como lo prometido era una fiesta latina, el reguetón, la salsa, y demás sonidos caribeños tuvieron un gran despliegue. Fiebre, su último sencillo, dio paso al desenfreno. La gente mantuvo las manos arriba mientras llegaban las canciones bailables, que ya son infaltables en las reuniones, como La bomba, Por arriba, por abajo, Pégate y La mordidita.
Las luces del escenario se apagaron a las 23:00, pero la algarabía quedó impregnada en los cuencanos.
EL ASTRO BORICUA HIPNOTIZÓ A LOS CUENCANOS. SU REPERTORIO FUE COREADO EN EL ESTADIO SERRANO AGUILAR.