JACQUES DE BASCHER ‘ EL DEMONIO’ QUE ENAMORÓ A KARL LAGERFELD
El mítico diseñador Karl Lagerfeld hablaba muy poco sobre su vida privada, y cuando lo hacía era para referirse únicamente al gran amor de su vida, Jacques de Bascher, un joven 18 años menor a él con el que mantuvo una relación de más de década y media. Según palabras del Káiser, “era el diablo hecho hombre con cara de Garbo. Era la persona que más me divertía, mi opuesto, imposible, odioso. Era perfecto”. La confesión se la hizo a Marie Ottavi, autora del libro Jacques de Bascher: dandy de l’ombre ( Jacques de Bascher,dandydelasombra). Lagerfeld y un veinteañero Jacques de Bascher se conocieron en 1973, en una de las tantas y agitadas noches parisinas. El ‘dandy’, proveniente de una familia de la alta sociedad pero venida a menos, tenía algo en su físico y en su manera de ser, entre elegante, maliciosa y atrevida, que volvió loco al entonces desconocido diseñador de origen alemán. Seducido por el joven de aire aristócrata, seguidor del licor, las drogas, los chicos y de gran estilo para vestir, Lagerfeld le ofreció una vida cómoda y ociosa, y una relación más platónica que carnal. “Amaba mucho a este chico, pero no tenía contacto físico con él”, comentaba para explicar que su interés por Jacques era otro. Su sola compañía le agradaba sobremanera y su libertinaje daba un respiro a una metódica y disciplinada vida laboral. Pero Jacques sí necesitaba saciar su apetito sexual, y en ello nada lo detenía. Fueron muchos los excesos y también los amantes que, parece ser, tuvo durante su relación con el Káiser. El más sonado, con Yves Saint Laurent, a quien cono- SAINT LAURENT Y LAGERFELD. Fueron grandes amigos durante 20 años. Pero las rivalidades profesionales y amorosas los separaron. Lagerfeld no fue al funeral del francés, fallecido en 2008.
ció en 1973. Al igual que su colega, el célebre diseñador francés perdió la cabeza por de Bascher. La aventura marcó el fin de su relación con Pierre Bergé, su entonces pareja, quien, enterado de la infidelidad del modisto, obligó a Jacques a romper con Saint Laurent. A partir de entonces nació la leyenda de la enemistad entre Lagerfeld e Yves Saint Laurent, un distanciamiento que duró hasta el fin de sus días.