CAPITANA MARVEL
Las respuestas las encontrará el cinéfilo al admirar a esta Capitana Marvel, personaje convertido en la primera superheroína del mundillo cinematográfico de ficción, de acción y thriller que han creado los estudios Marvel. Y empecemos felicitándolos porque su trama impone (con deteriores) feminismo. El tándem que forman los directores Anna Boden y Ryan Fleck demuestra efectividad aunque, a momentos, su trama y dirección tengan ligeros visos de incoherencia.
La ambientación de los años 90 es perfecta. Hasta se han acordado de un gran negocio que tuvo lugar en aquellos años: los vídeos Blockbuster, la cadena de películas transferidas a VHS que reinaba en el mercado. Para saborearla, añaden el cartel de un filme de Arnold Schwarzenegger. También surgen referencias a películas de Tom Cruise y Sylvester Stallone. En el campo de la música está Nirvana, entre algunas más.
Brie Larson, ganadora del Óscar 2015 por Lahabitación, tiene a su cargo el rol estelar y ello sorprende porque muestra el cambio que Hollywood impone a sus actrices: en años anteriores, la hubieran convertido en una intérprete destinada a roles dramáticos, nunca a un filme de acción. Pero los tiempos cambian y de ello se beneficia el género de los ‘superhéroes’, pues Brie Larson toma su caracterización con altura y radiación, cuyo poder artístico no se detiene en su accionar físico, sino en la fuerza de su expresión anímica, en la exposición que hace de sus sentimientos. Obsérvenla cuando, luego de una lucha su rostro, su expresión parece gritar… “¡Sí! ¿¡Y qué!?”.
Si ahora ha sorprendi- do que Pantera Negra sea la primera cinta de este género en subir a los Óscar en calidad de mejor película y llevarse tres galardones, nada sorprendería si en el futuro una actriz como Larson suba al escenario y se lleve la estatuilla en rol semejante. Annette Bening, Jude Law, Ben Mendelsohn y Samuel L. Jackson complementan el trabajo actoral.
Las secuencias de las batallas aéreas, el final, son brillantes. Mejor así porque a momentos la trama se enreda, pero queda solventada por la eficacia de todos quienes han intervenido en un filme que supera a La mujer maravilla, y esto se debe a Brie Larson.