A J U B L A O I C R T A P
“HAY VECES QUE ME HE SALIDO DEL CAMINO RECTO”
“Amo a Guayaquil, vivo aquí hace cinco años. Estoy totalmente adaptado, es mi segunda casa. Lo que más me costó fue acostumbrarme al tráfico”.
“Al día de hoy que un hombre se preocupe por su apariencia física ya no es un tabú. Y es lo que transmito en mi cuenta de Instagram, generar contenidos y empatía para gente que le guste verse bien, abarco desde lentes hasta zapatos”.
“Representar a un centro estético fue la patada de la buena suerte para entrar al mundo de las redes sociales”.
“Empecé en la comunicación como presentador de espacios musicales juveniles, después pasé a ser reportero en TC en Cosas de casa. Todo ese bagaje me permitió adentrarme en lo que hago ahora”.
“Hay improvisados en el área digital y las empresas son libres de escoger a quienes deseen, pero es necesario saber a quién se contrata y a qué público quieres llegar”.
EL INFLUENCER QUITEÑO, CON CERCA DE 19.000 SEGUIDORES EN INSTAGRAM, LE TIENE FOBIA A LOS ZANCUDOS, MUERE POR EL CALDO DE SALCHICHA Y ESTÁ A FAVOR DE LA IGUALDAD DE GÉNERO.
“Un influencer no debe limitarse a postear lo que hace en el día. Es necesaria la experiencia y transmitir contenidos para llegar a una marca y mantenerse en ella, además de la honestidad, la autenticidad, la creatividad y el conocimiento”.
“Sigo a influencer como Jorge Torres Arias (@Iamjotarias) por la manera como trasmite un sentir, al igual que Fabrizio Zambrano (@fzzioza) quien, a nivel de