INMINENCIA DE UNA ALEXITIMIA, GRABANDO
Después de lanzar en diciembre último la canción Final, la agrupación guayaquileña de metalcore Inminencia de una Alexitimia sigue trabajando en el estudio de grabación. “Nuestro próximo tema se va a llamar Conocidos. La idea principal es que este sea el último sencillo del EP que está por venir”, le contó a EXPRESIONES su vocalista, Joshua Bejarano.
Desde fines de los noventa y primeros años del nuevo siglo, en Guayaquil hubo grupos que si bien fusionaban géneros extremos como black y death metal, le daban mucha importancia a la melodía, como Misterio, Abismo Eterno, Mortuorium, Amghelis o incluso Incarnatus. El paso del tiempo trajo nuevos términos: groove metal, metalcore, deathcore; y nuevos proyectos: Mordaz, La Bicicleta del Diablo, Acaba Un Día, Refugio, que si bien tenían su propio estilo, también hacían esto que nos atrevemos a llamar ‘música violenta pero triste’, capaz de tener un poder edificante para cierto tipo de espíritus nostálgicos.
Inminencia de una Alexitimia forma parte de una nueva camada en Guayaquil que mantiene esta tradición, con nombres como Ravens and Crows, Last Parachutes, Restos y Cenizas; a diferencia de otras vertientes del metal extremo, que priorizan la agresividad, rapidez y disonancia, y se niegan a ‘suavizarse’.
“Este año queremos lanzar la mayor cantidad de material nuevo, incluyendo sesiones en vivo, conciertos y quizás nuevas versiones de nuestro primer disco Atelofobia. Realmente creemos que este EP reflejará la evolución de la agrupación y los cambios que hemos tenido desde que iniciamos en el bello y amargo mundo de la música independiente”, finalizó Joshua.